Ana Milán, el alma de la cuarentena

Ana Milán, el alma de la cuarentena

Meryl Streep no es la única que se toma copazos en las videollamadas.

La actriz Ana Milán.GTRES

“Llevo todo el día con la sensación de haber quedado con amigos”. Si empiezas un directo de Instagram así, quién no te va a querer. Ana Milán es la única que no habla con David Broncano de sexo, la misma a la que le molesta que le pregunten CONSTANTEMENTE cuántas gafas tiene y la actriz que ha pedido a 7.000 personas en un directo que le den un masaje en casa. No es humorista, aunque sí tiene mucho sentido del humor (del fino). Y, sobre todo, se ha coronado como la reina de la cuarentena.

Esta descripción se desprende de su cuenta de Instagram, donde se ha convertido para sus 778.000 seguidores en la persona con la que tener cada día una cita imprescindible. No es para menos: ella misma ha reconocido en alguna ocasión haber retrasado otras cosas para “tomar algo” con los espectadores de su perfil. Los copazos no son sólo cosa de Meryl Streep.

Sus directos empezaron con el estado de alarma. Pensó ”¿cómo puedo colaborar?” y se contestó a sí misma: compañía. Y tanta. Al principio se conectaban a sus vídeos 2.000 personas, 3.000, 4.000... y así hasta llegar a  los 16.000 de ahora. Ha creado su propia comunidad. Su hijo de 18 años debe fliparlo cada vez que la ve con el teléfono. Él, por cierto, es su obra de arte favorita: “Me salió muy bien”.

Sus followers no sueltan el móvil. Ana Milán es capaz de decir una bordería con mucha gracia y pasar el resto del tiempo sonriendo. Será porque tiene 46 años pero dice sentir que tiene 36. Y reconocer tener rarezas: le encanta cómo suena la palabra sempiterno.

Lo que no le gustan son las groserías ni los monos —de los que se niega a descender como el resto de seres humanos—. Cuando Broncano le preguntó ”¿se puede transmitir el coronavirus comiéndole los huevos a alguien?“casi salió espantada de La Resistencia.

Ana Milán se ha dejado conocer con sus vídeos, en los que ha llegado a decir que sólo daría las Campanadas con Fernando Simón y que se vestiría como si fuese a la boda de Farruquito. “Todo lo que no se pone Cristina Pedroche me lo pondría yo”.

Quizás por esa gracia y naturalidad ha conseguido reunir a tanta gente con la que hablar. De hecho, toda esta información se conoce por lo que cuenta. Y una más: “Si fuese una diosa griega sería Atenea, la de la justicia”.