Argentina salva los muebles "sin" Messi y Polonia tiene nuevo santo, su portero Szczęsny

Argentina salva los muebles "sin" Messi y Polonia tiene nuevo santo, su portero Szczęsny

En la jornada del vergonzante tropiezo (sin nada en juego) de Francia ante Túnez y con la sonada eliminación de Dinamarca.

Szczesny para un penalti a Messi que acabaría valiendo medio billete para los octavos para PoloniaGLYN KIRK via Getty Images

¿Y con qué se debe empezar el resumen de un día como el de este miércoles en Qatar? No será por frentes noticiosos, porque el guion tuvo que reescribirse sobre la marcha en el minuto 94′ del último duelo. En una jornada loquísima, frenética, de puro fútbol, especialmente en la sesión de noche, Argentina ha terminando salvando los muebles y pasa como primera del Grupo C.

Al final se impuso la lógica y los de Messi se clasificaron sin necesidad de encomendarse a su totémica figura. Sin hacer un mal partido, el legendario ’10′ falló un penalti que podía haber sido clave. Suerte que aparecieron dos de sus compañeros para ajusticiar a una Polonia salvada de milagro gracias a un nuevo santo de nombre difícilmente reproducible, el meta Wojciech Szczęsny.

La historia de Polonia va pareja a la de México. Porque durante muchos, muchos minutos, el pase a octavos estuvo del lado polaco solamente por tener menos tarjetas... empatado el resto de parámetros. México solo necesitaba un gol más (o que le metieran otro a Polonia). Pero finalmente, ese tanto llegó en la otra portería y Arabia Saudí mató las ilusiones aztecas, que se van con un triunfo de honor.

En el otro grupo cayó Dinamarca, el fallo más sonado en lo que va de Mundial, incapaz de hacerle un gol a Australia, que hizo buena su victoria... mientras Túnez celebraba, pese a caer en grupos, su ‘fiesta nacional’ por superar a una Francia hoy de vacaciones sin nada en juego.

Y, gol a gol, ya hay cuatro de los ocho cruces de octavos definidos: Países Bajos-EEUU y Argentina-Australia (ambos el sábado 3) e Inglaterra-Senegal y Francia-Polonia (domingo 4)

Túnez 1-0 Francia

  Como si le preocupase a la hinchada tunecina no pasar de ronda...Stu Forster via Getty Images

De producirse en cualquiera de las dos primeras jornadas los titulares serían prototípicos. ‘Zambombazo’, ‘fracaso’, ‘decepción’ y demás grandes términos en relación a la derrota de Francia ante una hipermotivada Túnez. Suerte que ocurrió cuando Francia no se jugaba nada, ni siquiera un primer puesto seguro salvo una goleada escandalosa que nunca estuvo cerca.

Pero el desdoro ahí queda, que nadie lo dude. Con un equipo lleno de suplentes y varias estrellas en el banco, Francia salió a cumplir el expediente pero su planteamiento se le volvió en contra pronto. Con el cuchillo entre los dientes, los tunecinos salieron a por todas: una victoria que les hiciera soñar con los octavos y el gustazo de poder tumbar a la que fue su nación imperial hasta mediados del siglo XX. Se notaron las ganas de unos y la apatía (y las rotaciones) de otros, pensando exclusivamente en los cruces.

Fruto del interés norteafricano acabaría llegando el gol en el 57′, tras otro fallo galo. El bochorno era tal que Deschamps no tuvo más remedio que sacar a su artillería, con Mbappé y Griezmann a la cabeza, para salvar la honra con al menos un gol. Y tras media hora de más ímpetu que acierto francés, acabó llegando el gol, precisamente de Griezmann. Pero el VAR dijo que era fuera de juego, no sin polémica. Y Túnez se quedó sin octavos pero acababa de ganar ‘su’ Mundial. La fiesta se desató en las gradas.

Australia 1-0 Dinamarca

  Mathew Leckie, autor del gol 'aussie'NICOLAS TUCAT via Getty Images

Tapado algo por el sonado (aunque irrelevante) traspiés francés, Dinamarca ha consumado un Mundial más que decepcionante. Con un solo gol en 270 minutos (en realidad 300 y pico con esos descuentos... más grave aún), los de Eriksen y cía han caído eliminados en grupos tras caer ante un rival a priori peor pero más efectivo.

Australia ha rentabilizado al máximo sus goles. El primer día para darse el gustazo inicial de adelantarse a Francia y, más importante, para ganarle a Túnez y a los daneses. Hoy el héroe fue el extremo Leckie, con un golazo coincidente en el tiempo con el tanto tunecino, cuyo efecto anulaba de golpe. Entre los nervios y el desacierto, Dinamarca no demostró nada para remontar (necesitaba dos goles para pasar de ronda) y así acabó sumida en la depresión del fracaso.

Polonia 0-2 Argentina

  Messi y varios compañeros saludan a su bien presente aficiónRichard Heathcote via Getty Images

Era el todo por el todo y Scaloni lo entendió. El partido se jugó, especialmente en la primera parte, en el área polaca, que no dejó de asediar Argentina... aunque el 0-0 le valía para pasar como segunda. Las ocasiones se sucedían para mayor gloria de Szczęsny, el meta polaco que no hacía sino agigantarse, mientras el resto del cuadro europeo casi ni aparecía.

Más cuando, cerca del descanso, el VAR concedió un polémico penalti sobre Messi que el propio Messi falló... o Szczęsny paró con una mano formidable. Por desgracia para Polonia su portero es humano, aunque vaya camino de la ‘santidad’ como su compatriota Juan Pablo II.

En el comienzo de la segunda parte apareció un héroe inesperado para Argentina, Alexis Mac Allister, que en un fulgurante ataque por el costado derecho apareció y dentro del área puso el 0-1 que daba a la albiceleste (hoy azul) el primer puesto. Argentina pudo jugar entonces a una versión menos ansiosa de su fútbol, intentando controlar el partido, aún más tras el buen 0-2 obra de Julián Álvarez. Polonia acabó salvándose con un omnipresente Szczęsny y la buena fe argentina, que frenó notablemente en el último tramo.

Arabia Saudí 1-2 México

  Luis Chávez, autor de uno de los mejores goles del MundialFrancois Nel via Getty Images

Si a los aztecas le venía faltando pegada en el Mundial la sacaron toda en el último día. Ante una Arabia Saudí que ya no daba más de sí —bastante han hecho con su hazaña inicial—, México se desató a la caza de un resultado milagroso que les diera el pase. Necesitaban ganar y de mucho en función de cómo se diera el otro duelo.

No tenía pinta visto el primer tiempo, pero todo cambió en segundos al volver a pisar el césped. En el 47′, México rompía su gafe (ni un gol llevaba por entonces), gracias a un certero Henry Martin. Pero la obra de arte iba a llegar poco después. Un lanzamiento de falta lejano y magistral de Luis Chávez en el 51′ valía el 0-2 y el derecho a soñar despiertos a 130 millones de paisanos.

Lo que vino entonces fue la tormenta casi perfecta. El propio Chávez en otra falta muy parecida, Lozano, Martin de nuevo... Era un no parar de intentarlo y de reclamarlo: hasta dos goles le anularon a la ‘tri’ entre numerosas quejas de penalti. Pero, para desgracia del ‘Tata’ Martino, ese deseado tercer tanto solo llegó en la ‘otra’ portería, y fue el de la honra de Arabia Saudí, que anulaba cualquier opción de los centroamericanos en la última jugada.