Arrimadas e Igea: un debate tranquilo con pullas por equipos y organización

Arrimadas e Igea: un debate tranquilo con pullas por equipos y organización

La portavoz parlamentaria solicitó a su rival que se comprometa a no atacar a Ciudadanos.

Arrimadas e IgeaEFE

Los candidatos a liderar Cs, Inés Arrimadas y Francisco Igea, protagonizaro un debate tranquilo, pero con pullas por la forma de entender la organización del partido y la discrepancia hasta el punto de que la portavoz parlamentaria le ha pedido que se comprometa a no atacar Ciudadanos públicamente.

“Hay una diferencia muy clara entre ser autocrítico y ser autodestructivo”, ha reprochado Arrimadas a Igea en un debate moderado por el periodista Juan Fernández Miranda que se celebró en la sede de Cs.

Las críticas, unas cuantas durante la hora y media de cara a cara mantenidas en el ecuador de la campaña, no subieron mucho de tono pese a estar muy reciente el encontronazo que tuvieron en Valladolid la semana pasada cuando Arrimadas no quiso reunirse con el vicepresidente de Castilla y León.

Pelea reñida en el segundo bloque

La pelea estuvo más reñida en el segundo bloque de los tres en los que estaba estructurado el debate: Liderazgo y equipos de las candidaturas, en el que Igea cargaba contra el “continuismo” de la ejecutiva propuesta por Arrimadas porque solo “ha cambiado dos o tres nombres, pero todo sigue igual” y también contra la falta de crítica interna que cree que se refleja en su candidatura.

A su juicio, no ha tomado nota de lo que se ha hecho mal para tener un desastre electoral como el del 10N, al pasar de 57 a 10 escaños, y por eso,señalaba,no ha cambiado ni equipos ni estrategia ni organización.

“Es evidente, además, que tienes un equipo crítico porque ninguna de las siete personas que alzaron la voz en contra de la estrategia de Cs está en tu ejecutiva”, ironizaba el dirigente castellanoleonés, que reprochó a su contrincante que siga en la línea de Albert Rivera, sin admitir la discrepancia interna ni asumir los errores que se han cometido.

Arrimadas contraatacaba entonces insistiendo en que el cambio “es evidente y está garantizado” y que a ella le gusta la crítica pero a lo que no se ha dedicado es a ir “por los medios diciendo que este partido esta muerto, que no es democrático, que tiene meningitis o que es leninista”, algo que ella -aseguraba- no hará si pierde el apoyo de los afiliados.

Apoyo al ganador

Muy al contrario, le apoyará totalmente si es él quien gana las primarias del próximo fin de semana.

En el bloque centrado en el modelo y la estrategia del partido, tanto Arrimadas como Igea mantuvieron los argumentos que han esgrimido durante las últimas semanas, con la portavoz parlamentaria centrada en cargar contra las “baronías” que atribuye a su contrincante y el vicepresidente de Castilla y León con apelaciones al continuismo sobre las equivocaciones cometidas y la falta de participación de los militantes.

Por su parte, Igea acusaba a Arrimadas de tratar a los militantes como si no fueran “gente lista”.

Sobre su propuesta para que las ejecutivas autonómicas sean elegidas por los militantes en lugar de por la dirección nacional, Igea reiteraba que es necesario que los cargos no le tengan que “deber la vida” a otro cargo, sino que dependan de quienes son los “accionistas” del partido.

En el primero de los bloques del debate, referido a los retos de España, ambos coincidieron en su rechazo hacia las políticas del Gobierno socialista, pero discreparon al analizar la estrategia de pactos de Cs, tanto en las elecciones celebradas en 2019, como en las perspectivas que les da el suscrito con el PP para las próximas vascas.

Al terminar el debate, Igea, que se ha visto ganador de éste, se mostraba muy contento porque los militantes pudieran ver los dos proyectos del partido y de haber confrontado con Arrimadas de una manera sosegada: “Me he quitado el chaleco de las bombas de autodestrucción”, bromeó.