Ayuso, preguntada por su apartahotel: "Pretende que yo resuelva los asuntos de los madrileños sobre el comedor en el que ceno"

Ayuso, preguntada por su apartahotel: "Pretende que yo resuelva los asuntos de los madrileños sobre el comedor en el que ceno"

La presidenta de la Comunidad de Madrid justifica su estancia y anuncia que abrirá una investigación sobre el contrato erróneamente atribuido a Room Mate.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (d) conversa con el consejero de Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty (i) este jueves.EFE/Mariscal

Isabel Díaz Ayuso ha justificado este jueves en la Asamblea de Madrid el haberse alojado en un apartahotel de lujo de la cadena Room Mate, propiedad del empresario Kike Sarasola, desde hace dos meses.

La presidenta de la Comunidad de Madrid ha defendido su decisión recordando que otro presidente autonómico ha estado en su misma situación, Quim Torra, “ha estado en unas dependencias que la Generalidad ha puesto a su disposición mientras pasaba la cuarentena”.

“No sé por qué tengo que ser tratada de manera distinta. Cualquier otro presidente autónomico en mi situación hubiera hecho algo similar, que es dejar su propiedad para estar confinado en otro sitio. Usted pretende que yo resuelva los asuntos de los madrileños sobre el comedor en el que ceno todos los días, pues no creo que eso sea lo más oportuno” ha añadido.

Según Ayuso, la mitad de su equipo “estaba infectado” y no tenía por qué “estar desplazando a tanta gente”, por lo que decidió “voluntariamente” confinarse en un lugar “donde pudiera a su vez un familiar ayudarme a comer”.

“Estaba en un hotel que no estaba dando servicio, cerrado al público y en un momento en el que estando yo contagiada no podía ni bajar al supermercado”, ha señalado antes de recalcar que buscó “la mejor oportunidad” para no molestar a sus vecinos, a su equipo y para “seguir trabajando con unas garantías dignas para el cargo”.

“Mientras yo esté trabajando como presidenta de la Comunidad de Madrid lo haré en un sitio con unas banderas y digno, como por ejemplo con la foto del rey”, prosiguió.

Una investigación interna

La presidenta regional a continuación anunció que abrirá una investigación interna en la Comunidad de Madrid sobre la publicación por error en su Portal de Contratación del un contrato adjudicado “por error” a la cadena hotelera Room Mate.

Según ha expuesto, la publicación de este contrato, que primero apareció adjudicado a Room Mate para luego cambiarse el nombre del adjudicatario por el de la Coordinadora del Tercer Sector de la Comunidad de Madrid, ha sido “lo único raro” entre la polémica por dicho apartamento.

“Ha sido un contrato que se ha subido casualmente mal puesto, y que se ha enterado justo un periodista y en el momento en que lo ha conocido lo han descolgado a unas horas extrañas”, ha dicho Ayuso en respuesta a una pregunta del portavoz de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà.

Según publicó el lunes la revista Vanity Fair, Ayuso está instalada desde el 16 de marzo pasado en un apartahotel de lujo de la capital propiedad del empresario Kike Sarasola, presidente de Room Mate.

Esta cadena hotelera ha cedido a la Comunidad de Madrid sus seis hoteles en la capital durante la pandemia, cuatro para personal sanitario y otros dos para personas mayores sin coronavirus.

De los dos hoteles destinados a personas mayores sólo se ha puesto uno en marcha, sobre el que la Consejería de Políticas Sociales de la Comunidad de Madrid firmó un contrato en el que figura como adjudicatario la Coordinadora del Tercer Sector, encargada de prestar los servicios socisanitarios.

Sin embargo, en el Portal de Contratación de la Comunidad de Madrid llegó a figurar como adjudicatario del contrato Room Mate por un importe de 565.749,58 euros con IVA incluido.

Un “error” según fuentes de la Consejería de Políticas Sociales, que posteriormente cambiaron en el Portal de Contratación el nombre del adjudicatario por el de la Coordinadora del Tercer Sector de la Comunidad de Madrid y redujeron el importe a 240.443,57 euros IVA incluido.

El contrato firmado, con fecha de 16 de abril, cifra en 157.393,47 euros el coste total del servicio, un importe inferior a la estimación inicial de 240.443,57 que hizo la Consejería, que justifica esa diferencia en la necesidad de hacer “una retención de crédito” en una situación de emergencia.