El Madrid se impone al Barça en un 'clásico' vibrante y polémico (1-3)

El Madrid se impone al Barça en un 'clásico' vibrante y polémico (1-3)

El VAR pitó un penalti a Ramos tras un agarrón en el área que supuso el 1-2.

Luka Modric.Alex Caparros via Getty Images

El Real Madrid se ha llevado un ‘clásico’ vibrante y polémico en el Camp Nou ante un Barça que no se sobrepuso al penalti que pitó el árbitro gracias al VAR y que supuso el 1-2.

Un partido de ida y vuelta que a los 10 minutos ya iba 1-1 gracias a los goles de Valverde y Ansu Fati.

Ramos puso el 1-2 de penalti y Modric sentenció en el tramo final con un auténtico golazo.

El partido comenzó con los dos equipos al ataque, poniendo a prueba a los porteros rivales, que tuvieron mucho más protagonismo tras encajar un gol cada uno.

Sobre todo Neto, que fue el mejor de su equipo en la primera mitad al evitar varias ocasiones madridistas.

Messi, muy enchufado pero sin acierto de cara a portería, tiró del Barça con ayuda de Ansu Fati y un gran juego de Dest y Jordi Alba por las bandas.

El electrónico llegó con empate al descanso y la segunda parte comenzó con el equipo local dando la sensación de querer llevarse el partido.

Pero el Madrid aguantó y llegó la jugada que marcó el encuentro. En el minuto 60, un agarrón en el área de Lenglet, defensa del Barça, a Sergio Ramos, capitán del Madrid, fue visto desde la sala del VAR.

En una decisión polémica, ya que no se suele entrar en este tipo de acciones, el árbitro paró el encuentro, consultó el televisor y señaló los once metros. Ramos anotó el 1-2.

Y el Barça no supo reaccionar. Ni Koeman, su entrenador, tampoco. Zidane metió a Modric por Valverde y el croata sentenció a pocos minutos del final tras driblar al portero en un auténtico golazo.

El Madrid se lleva un ‘clásico’ que necesitaba con urgencia tras las derrotas en casa ante el Cádiz en Liga y el Shakhtar Donetsk en Champions. El Barça suma su segunda derrota consecutiva tras perder la pasada semana ante el Getafe.

Los de Zidane se sitúan líderes provisionales con 13 puntos mientras que los de Koeman son décimos, con un partido menos y siete puntos.

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