Borrell plantea que Reino Unido podría pedir una prórroga al Brexit si convoca elecciones

Más voces se suman a una posible prórroga al Brexit. El último ha sido Josep Borrell, ministro de Asuntos Exteriores y futuro jefe de la diplomacia europea. Este jueves se ha reunido ministro británico para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, Stephen Barclay, y ha señalado que aunque confía en alcanzar un acuerdo a tiempo, Reino Unido debe presentar alguna propuesta o pedir una prórroga para, por ejemplo, celebrar elecciones.

El Reino Unido tiene como fecha límite para salir de la UE el 31 de octubre, haya o no acuerdo, aunque la presidenta de la Comisión Europea ya ha advertido de que se podría conceder una prórroga si hay una “buena razón”.

″¿Y cuál sería una buena razón? Unas elecciones podrían ser una buena razón”, ha apuntado Borrell.

Borrell y Barclay han analizado diversos asuntos relacionados con el brexit y sus posibles consecuencias para ambos países y han resaltado la necesidad de mantener la “buena sintonía” entre las dos naciones cuando se produzca la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Por medio de un comunicado, Exteriores ha informado de que Borrell ha recalcado que la salida sin acuerdo es un escenario no deseado y ha insistido en que el Reino Unido “debe presentar propuestas concretas” si quiere modificar la aplicación de los acuerdos existentes.

Además, ambos ministros han coincidido en la necesidad de “continuar trabajando conjuntamente como se viene haciendo para minimizar posibles impactos negativos del brexit sobre la ciudadanía y el sector económico”.

España ya cuenta con un Plan de Contingencia ante un Brexit sin acuerdo

Por otra parte, la nota de Exteriores también ha recordado que España ya ha elaborado y aprobado un Plan de Contingencia que prevé las medidas a adoptar si finalmente el brexit es sin acuerdo.

Este plan de contingencia recoge una larga serie de medidas legislativas, logísticas y en sectores sensibles como las telecomunicaciones, servicios financieros, y otros que se verían afectados por una salida no pactada.

La aplicación de la mayoría de las medidas está condicionada a que el Reino Unido apruebe medidas similares que protejan los derechos de empresas y ciudadanos españoles establecidos en el país británico.

A día de hoy, el número de ciudadanos españoles registrados en Reino Unido asciende a más de 165.000, mientras que el número de ciudadanos británicos en España es de 330.000 aproximadamente.

Según Exteriores, los ciudadanos españoles en el Reino Unido pueden informarse en la embajada de España en Londres y en los demás consulados en aquel país, que cuentan con el servicio “Ventanilla Única Brexit” para responder a consultas particulares, organizar reuniones informativas y brindar asistencia personalizada en los trámites de registro “posbrexit”.

Además, para hacer frente a las necesidades de los ciudadanos españoles tras la salida del Reino Unido de la UE, el ministerio ha reforzado las plantillas de los consulados generales en Londres y Edimburgo y ordenado la próxima apertura de un consulado general en Manchester.

Femen protesta contra el Brexit

Antes de que tuviera lugar la reunión de Borrell y Barclay, una activista del grupo Femen se ha manifestado contra el la salida del Reino Unido desnuda de cintura para arriba, con una pancarta que decía en ingles, “Romped el brexit” y, por detrás, “Reino Unido dentro, el odio fuera”. Sobre su pecho, en grandes letras negras se podía leer, “Brexit no nos romperá”. Tras protestar durante un par de minutos frente a la puerta cerrada de uno de los edificios del Ministerio de Asuntos Exteriores, la activista ha recogido sus cosas del suelo y se ha marchado calle abajo con el único apoyo de una persona que aplaudía.

La protesta no ha sido presenciada más que por algún transeúnte y un pequeño grupo de diplomáticos que acababan de despedir a una delegación de Senegal que esta tarde se ha reunido con el ministro.

Sin embargo, ni Borrell ni Barclay han presenciado la protesta, dado que se han reunido en otro edificio del ministerio a la vuelta de la esquina, en el Palacio de Santa Cruz, donde el ministro tiene su despacho.