¡Brindemos por estos siete años!

¡Brindemos por estos siete años!

EL HUFFPOST

Hoy cumplimos 7 años con vosotros y esta mañana he tenido una idea bastante poco original: buscar en las sugerencias de Google “7 años” para ver si los resultados reflejan nuestra historia como medio de comunicación. El primero es “Guerra de los siete años”. Sí, define bien parte de nuestra historia, porque trabajar en un medio de comunicación tiene mucho de guerra: con los competidores, con los políticos, con las agencias de prensa, con los resultados económicos… Muchos lunes no sabes si te vas a la redacción o a la guerra de Vietnam.

El segundo resultado es “7 años en el Tibet”. Pues bien, también nos define un poco, porque muchas veces tenemos la sensación de que cuando no estamos en guerra es porque dedicamos nuestros esfuerzos a escalar el Tíbet. Nuestro Tíbet particular tiene otros nombres: Comscore, Omniture, páginas vistas, tiempo en página… En fin, todos esos términos que la mayoría de los que estáis aquí conocéis.

Nosotros seguimos escalando nuestro Tíbet, que consiste sobre todo en tener cada día más lectores y contenidos de mayor calidad. Y poco a poco, como en una escalada complicada, vamos avanzando metros y metros. Según Comscore tenemos más de 7 millones de lectores y nos mantenemos entre los cinco nativos digitales más leídos en España. Según Omniture, ya estamos en 11 millones. Y cerramos todos los meses con una media de 60 millones de páginas vistas. Os garantizo que el año que viene habremos ascendido más metros.

El tercer resultado es “7 años de casados”, entrada que he consultado con un poco de miedo porque, a priori, nada bueno podía salir de ahí. El caso es que me he enterado de que los siete años de casados se celebran como las Bodas de lana. Se definen así: ”Llegar a este aniversario significa que escuchas, quieres, conoces y aceptas a tu pareja tal y como es”.

Lo cierto es que nosotros, que somos un poco raros, somos bígamos, porque tenemos dos parejas: Prisa Noticias en España y The Huffington Post en EEUU. Os aseguro que no se puede tener mejores parejas. A tanto llega el amor que, a lo largo de estos años, nos han crecido los niños: somos 14 ediciones internacionales repartidas por todo el mundo, desde Europa a América, pasando por Latinoamérica, Asia y Oceanía. En El HuffPost nunca se pone el sol.

En fin, que luego he buscado en Google Noticias “siete años” y me ha salido una entrevista en Onda Cero a un señor llamado Paco con el titular: “Con 7 años cuidaba cabras y cerdos pero ahora he aprobado la ESO”. Os juro que por más que he pensando no he encontrado ninguna correlación con El HuffPost.

No me quiero alargar más porque habéis venido aquí a lo que habéis venido, no a escucharme a mí. Dejadme comentar solo que estamos muy felices del trabajo que hemos hecho desde la última vez que nos vimos aquí, hace ahora un año: hemos lanzado nuestros primeros podcast, de actualidad y feminismo; hemos cambiado nuestras aperturas de la web, bastante más vistosas y elegantes; hemos cerrado un acuerdo de colaboración con la web El Televisero; una de nuestras redactoras, Marina Velasco, ha ganado un premio internacional con un texto (leedlo) sobre las esterilizaciones forzosas en Perú durante el gobierno de Fujimori. Este año también nos hemos volcado en publicar una cobertura magnífica sobre Europa y la importancia de la Unión Europea. Y hemos aumentado aún más nuestro compromiso con el movimiento LGTBIQ+ y con la igualdad de las mujeres. Sólo un dato: en 2019 las mujeres de la redacción han dado ya el sorpasso a los hombres: tenemos mayoría femenina en la redacción.

¡Un minuto más! A ver si pensábais que no iba a haber una parte de agradecimientos: gracias especiales a nuestros patrocinadores Martin Miller’s y Transmediterránea, y gracias a Missushi por haber desplegado una esquina con sushi para todos. Un beso de parte de todos a los que no han podido venir, Montserrat Domínguez y Víctor Arbaizar, dos personas que son ADN de El HuffPost. A Alberto de los Santos, director comercial de El HuffPost, y a Mónica Guirao, a la que tenéis que responsabilizar de todos los aciertos de esta fiesta. Si esta celebración es lo que es desde hace siete años es gracias a ella.

Para acabar, voy a hacer algo que no se había hecho nunca en esta fiesta: dedicársela a dos personas que nos han acompañado otros años y que hoy, desgraciadamente, no están con nosotros: al periodista Pepe Cervera, al que considero mi maestro, y a Alfredo Pérez Rubalcaba. Amigos, ¡brindemos por ellos!