Bruselas rebaja el crecimiento de España en 2019 al 1,9%

Bruselas rebaja el crecimiento de España en 2019 al 1,9%

En un contexto de "elevada" incertidumbre.

Bandera de la Unión Europea.EFE

La Comisión Europea ha recortado hasta el 1,9% su previsión de crecimiento del PIB de España para 2019, un porcentaje que es cuatro décimas inferior al que estimaba en verano y dos décimas inferior a la proyección del Gobierno de Pedro Sánchez, al tiempo que ha advertido de que los riesgos se enmarcan en un contexto de “elevada” incertidumbre.

Bruselas explica que la mitad de esta revisión se debe a la revisión estadística de la Contabilidad Nacional Anual realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la otra mitad a una previsión más débil en el segundo semestre de este año.

La Comisión Europea ha recortado hasta el 1,9% su previsión de crecimiento del PIB de España para 2019, un porcentaje que es cuatro décimas inferior al que estimaba en verano y dos décimas inferior a la proyección del Gobierno de Pedro Sánchez, al tiempo que ha advertido de que los riesgos se enmarcan en un contexto de “elevada” incertidumbre.

Bruselas explica que la mitad de esta revisión se debe a la revisión estadística de la Contabilidad Nacional Anual realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la otra mitad a una previsión más débil en el segundo semestre de este año.

En particular, Bruselas prevé consumo privado se recuperará “levemente” pero seguirá aportando un “moderado” impulso al crecimiento. La mayor contribución vendrá, por contra, por el lado del sector exterior, debido a un incremento leve pero continuado de las exportaciones y a crecimiento “inusualmente” bajo de las importaciones.

El déficit cerrará 2019 en el 2,3%

Con respecto al comportamiento del déficit público, las previsiones europeas prevén que cierre este año en el 2,3%, tres décimas más que lo que calcula el Gobierno en el Plan Presupuestario enviado a Bruselas a mediados de octubre.

La recuperación del saldo negativo de las cuentas públicas proseguirá en 2020, aunque a un ritmo leve, hasta alcanzar una diferencia negativa entre ingresos y gastos públicos del 2,2%. La Comisión, sin embargo, ha calculado este dato en ausencia de un presupuesto aprobado para el próximo año, por lo que la mejora se debe exclusivamente al ciclo económico.