Desde dentro del "éxodo" de Jersón: "Los que saben evitan ir", "buscan asustar a la población con mentiras"

Emergencia en Jersón. Las autoridades prorrusas de Ucrania han llamado a una evacuación urgente de su población ante el reclamo de la inminente ofensiva ucraniana para recuperar una ciudad clave en el sur y fundamental para el devenir de la guerra. La situación es tal, que Putin ha decretado la ley marcial en esta y las otras tres regiones recientemente anexionadas (Donetsk, Lugansk y Zaporiyia) para intentar imponer aún más su ley.

La operación, adelantada la semana pasada e iniciada este miércoles, pasa por un corredor humanitario dirigido y conducido por Rusia hacia territorio bajo su dominio. En concreto, hacia Crimea, península ucraniana pero controlada y anexionada ilegalmente por Putin desde 2014.

Precisamente, por ser un destino bajo dominación rusa, no todos están respondiendo a una operación que podría acoger a 50.000 o 60.000 personas, según cálculos de las autoridades locales. Entre los que rechazan el ‘salvoconducto’ ruso está Vitali, un ciudadano ucraniano-español. A escasos metros de uno de esos embarques de emergencia, en un mensaje al que ha tenido acceso El HuffPost, explica que “la gente está muy asustada”. “Como el puente de la ciudad está destrozado, hay que subirse a los barcos fletados por Rusia”.

Él espera poder salir de una ciudad en la que la situación es cada vez peor ante la represión de las fuerzas invasoras y la cercana contraofensiva ucraniana. Solo en esta región, las tropas de Kiev han recuperado ya 75 localidades, 1.200 kilómetros cuadrados en su avance hacia la ciudad principal.

Pero maneja otro destino dentro de la Ucrania libre, que pide no revelar por razones de seguridad. Sin embargo, a última hora su padre el empresario Julio Suárez, reconoce que los planes se han paralizado por el miedo a que las autoridades rusas sigan los pasos de su hijo y el resto de amigos. Escapar no es fácil, expone mientras explica, de forma confidencial, la estrategia que estos tenían pensada y que tendrá que esperar mientras no decaigan los controles para salir de una población prácticamente cerrada. De hecho, Rusia ha prohibido que entre civiles a este enclave del sur durante, al menos, una semana. “

Desde España, Julio comparte otros testimonios de ciudadanos locales. Habla de un ”éxodo masivo”, tanto por vía fluvial a través del río Dniéper —la que controla Rusia— como por carretera en otras direcciones. “El corredor ruso solamente va hacia Crimea y en esa vía, quien está más despierto aprovecha la oportunidad para marcharse hacia Georgia”, añade. Pero esos son los menos.

Situación de Jersón y, al sur, la Península de Crimea, conectadas por el río Dniéper y el mar Negro

Los hechos se han disparado en las últimas horas. Tras el anuncio del gobernador prorruso Vladimir Saldo adelantando los planes de evacuación, entre el martes y hoy miércoles, los habitantes de Jersón con telefonía móvil rusa (que no son todos) han recibido dos MSM, mensajes de texto con contenido multimedia, llamando a la evacuación urgente. Este fue el primero:

Horas más tarde, llegaba el segundo:

Otra fuente, que no han querido revelar su identidad, explica que los mensajes de las autoridades “buscan asustar a la población, mintiendo sobre que las tropas ucranianas van a bombardearla, cuando la realidad es que son ellos los que siempre se ven destruyendo las ciudades que han ocupado”. La última comunicación, ya en la tarde-noche del miércoles, hace referencia a unos supuestos planes ucranianos para bombardear la presa local, lo que provocaría la inundación de la ciudad

Por ahora no se conocen cifras exactas de cuántos habitantes han accedido a los designios de Moscú para una ciudad muy mermada en población y que contaba con cerca de 300.000 habitantes antes de la guerra.

Entre los que sí ha salido ya hacia Crimea, otra voz confiesa de forma anónima que “durante el viaje” los civiles desplazados reciben un trato correcto, pero que después de pasar a Rusia, la situación cambia. Siempre según su versión, más allá de la frontera, los rusos han habilitado un campo de refugiados, con tiendas de campaña que “no están preparadas” y bajo situaciones difíciles, con frío y falta de recursos, sin disponer ni siquiera de baños. Por ello, remata, “los que están informados evitan ir allí”.

Las autoridades indican los requisitos y ‘consejos’ para salir de Jersón

En un tercer MSM, las autoridades han escrito a su población ante los numerosos problemas por el ”éxodo” semiforzoso, que está colapsando las vías de salida de la ciudad. En la comunicación, remarcan los documentos necesarios para presentarse en los puntos de control y los requisitos previos para poder salir.

Entre las cuestiones que indican los gobernadores prorrusos, marcan llevar dinero, ropa “cómoda”, suministro de agua y comida para 2-3 días y que tanto los niños como los equipajes deben llevar ‘etiquetas’ que certifiquen sus identidades. En total, las pertenencias que lleve consigo cada ciudadano no pueden superar los 50 kilos. Este es el mensaje:

Bajo la ley marcial

Jersón, como las otras tres regiones ilegalmente anexionadas por Putin tras los referendos falseados, se encuentra bajo la ley marcial, decretada de urgencia por el líder ruso para intentar dominar un entorno que le es cada vez más hostil y con las tropas de Zelenski ganando terreno, metro a metro, en todas las direcciones.

Los cálculos no oficiales hablan de varias decenas de miles los kilómetros recuperados en todo el país, del que Rusia ya no controla más que un 15%.

Con su jugada, el Kremlin quiere conceder plenos poderes a su policía y militares en la zona y controlar los movimientos de la población. Hace una semana, el propio Julio Suárez daba cuenta a este medio de cómo las tropas invasoras llegaban a pasar a los vecinos para revisar el contenido de sus teléfonos.

Ahora, la perspectiva es incluso peor, al amparo legal del decreto. Bajo el paraguas de la ley marcial, los agentes satélite de Moscú podrán incluso detener a cualquier persona que no siga sus indicaciones.

“Ataques masivos” indiscriminados desde hace más de una semana

No es la única medida que ha lanzado Putin este miércoles. Junto a su mandato para militarizar las cuatro regiones, ha dado orden de reforzar las defensas de los territorios rusos fronterizos, tras el ataque ucraniano al puente de Kerch en Crimea hace nueve días. Así, tanto en la península como en las regiones de Krasnodar, Belgorod, Briansk, Voronezh, Kursk y Rostov, las autoridades podrán restringir la entrada y salida de ciudadanos y limitar la circulación.

Ese atentado contra el puente que conecta Crimea con Rusia dio pie a Putin a iniciar una serie de bombardeos indiscriminados —“ataques masivos”, en terminología del Kremlin— contra poblaciones civiles e infraestructuras críticas, que depararon decenas de muertos en Kiev, Zaporiyia, Sumy y otros puntos, junto a numerosísimos daños en la red eléctrica ucraniana.

Aunque el viernes el propio Putin anunció el fin de estas acciones, ni 72 horas después volvió a la carga con un nuevo ataque sobre Kiev y Sumy, servido de drones kamikazes iraníes. Las bombas han vuelto a caer este miércoles sobre la capital, mientras desde fuera, el papel de Irán como suministrador ruso añade más tensión a un conflicto que sigue bajo el radar de la OTAN y la UE, que anuncian nuevas sanciones y medidas para ayudar a Ucrania.