'Día D' en la mirada de un veterano

'Día D' en la mirada de un veterano

Hace poco más de un mes una conocida presentadora de televisión francesa estaba haciendo un reportaje en Los Angeles. El equipo se quedó bloqueado por un homenaje a un grupo de ancianos. La presentadora preguntó qué estaban celebrando: "Hace setenta años estábamos llegando a Normandía".

Hace poco más de un mes una conocida presentadora de televisión francesa estaba haciendo un reportaje sobre el clima en Los Angeles. El equipo se quedó bloqueado en una calle cortada por un homenaje a un grupo de ancianos muy bien vestidos. Maitena, la presentadora, se les acercó y preguntó a uno de ellos que qué estaban celebrando:

- "Señorita, somos veteranos de guerra. Hace setenta años estábamos llegando a Normandía para acabar con la ocupación de la Alemania nazi".

Maitena le cogió la mano y le dijo :

- "Gracias de todo corazón. Gracias a usted he nacido en un país libre y puedo hablar en francés".

Los dos se miraron y lloraron emocionados durante uno de esos momentos de gracia que nos hacen sentir el peso de la historia y la importancia de mantener la memoria viva.

Maitena nos contaba esta anécdota la otra noche durante una cena entre amigos. Éramos seis y a todos se nos empañaron los ojos. La conversación a partir de ese momento derivó hacia los recuerdos de una Francia en guerra y de una Francia liberada. Recuerdos aun muy presentes en las familias y en la sociedad francesa. Quedan pocos veteranos, pocos testigos directos de aquella barbarie que recorrió Europa en los años 40. Por eso es fundamental prestar mucha atención a todo lo que aún puedan contarnos.

Lo que el 6 de junio vamos a celebrar en Normandía es mucho más que un encuentro entre 20 jefes de Estado y de Gobierno del mundo. En las redacciones nos agitamos con la organización del evento, las acreditaciones, la presencia de la reina de Inglaterra, Obama, Putin y hasta un recién estrenado presidente de Ucrania.

(Hago un paréntesis para recordar que en la lucha contra el nazismo murieron más ucranianos que americanos, franceses o británicos juntos. Solamente durante el desembarco, participaron 10.000 soldados ucranianos bajo bandera canadiense. 84 de ellos están enterrados en uno de los muchos cementerios internacionales que pueblan las costas normandas.)

Vuelvo a la ceremonia. La cita es a las dos y media de la tarde en Ouistreham, una ciudad convertida en fortaleza por los alemanes que arrasaron las bonitas villas de la playa para sembrar bunkers, nidos de metralletas y morteros. Durante dos horas aproximadamente y en presencia de 7.000 invitados en Ouistreham se va a rememorar la Segunda Guerra Mundial en cuatro actos: la Europa ocupada, el día mas largo, el largo camino hacia la victoria y los caminos de la Paz y la construcción europea.

El mundo entero será testigo de este acontecimiento. Todos podremos ver a esos 18 jefes de Estado unidos para rememorar el inmenso desastre de una confrontación mundial. Unidos también para celebrar la victoria de un continente que respira en PAZ desde hace 70 años.

Muy brutos tienen que ser estos 20 líderes para romper de nuevo la estabilidad en Europa.

Ojalá se crucen todos con un veterano como el que encontró Maitena y les embargue la emoción necesaria para estrechar sus manos. Que entierren sus ambiciones expansionistas los unos y sus nacionalismos belicosos los otros. El mejor homenaje que se puede rendir a los que liberaron Europa del nazismo es mantener un continente en PAZ, una vieja Europa unida capaz de transmitir sus viejos valores de democracia, libertad y derechos humanos allí donde sea necesario.