El alcalde de Genalguacil denuncia entre lágrimas la mala gestión del incendio de Sierra Bermeja

El alcalde de Genalguacil denuncia entre lágrimas la mala gestión del incendio de Sierra Bermeja

Miguel Ángel Herrera no ha podido evitar emocionarse por lo sucedido.

Entre lágrimas, Miguel Ángel Herrera, alcalde del municipio malagueño de Genalguacil, afectado por el incendio de Sierra Bermeja, ha criticado la mala gestión y coordinación del Gobierno de Andalucía para hacer frente a este terrible suceso, que ha calcinado más de 6.000 hectáreas y se ha cobrado la vida de un bombero.

“La situación está muy mal desde el principio”, ha dicho el regidor, quien ha asegurado que “el fuego era inevitable porque hay gente muy mala” pero que “lo que era evitable era la catástrofe”.

“Esto está pasando porque hay una dejadez tremenda y esto se ha convertido en una historia política más que en un sistema técnico”, se ha quejado ante los periodistas.

“Ayer anunciamos que había un foco pequeño y que había que intervenir. Avisé de lo que iba a ocurrir. Ocurrió”, ha afirmado. “Esta mañana, en la reunión aquí también dije lo que iba a pasar, cuántos medios venían. He informado los puntos donde tenían que actuar. Hay 41 medios en la zona, aquí se han destinado seis en el mejor de los casos”, se ha lamentado.

El alcalde afirma que “a los miembros del Infoca les da miedo hablar de la dejadez que ha habido allí, desprotegidos”. “Y por eso ocurre esto”, ha asegurado Herrera, cuyo pueblo ha tenido que ser desalojado por el avance del fuego.

"No voy a permitir que ningún político, por intereses políticos, juegue con el futuro de mi pueblo"

“Decíamos esta mañana en la reunión que hoy, en óptimas condiciones, el fuego estaría controlado en Genalguacil. Está peor que nunca. Hemos estado llamando continuamente para que se atendieran los distintos focos y no se ha hecho nada”, ha aseverado.

Herrera asegura que para él “es super doloroso” tener que enfrentarse “solo” a las autoridades. “Pero lo que no voy a permitir es que mi pueblo se vuelva a quemar otra vez”, ha dicho.

Entonces se ha emocionado y ha comenzado a llorar recordando que algo así ya “pasó en el 94 y se quemaron las fincas”. “Anoche dije que a partir de hoy llegaban a las casas de los vecinos y ha pasado. Y no voy a permitir que ningún político, por intereses políticos, juegue con el futuro de mi pueblo”, ha afirmado visiblemente emocionado.