El BCE eleva los tipos de interés otro 0,75% hasta alcanzar su nivel más alto desde 2009

El BCE eleva los tipos de interés otro 0,75% hasta alcanzar su nivel más alto desde 2009

El organismo financiero europeo continúa su hoja de ruta para combatir la inflación subiendo el precio del dinero por tercera vez consecutiva.

Vista de la sede del BCE.DANIEL ROLAND via AFP via Getty Images

El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido elevar los tipos de interés de nuevo en 75 puntos básicos, de forma que el tipo de interés para sus operaciones de refinanciación se situará en el 2%, mientras que la tasa de depósito alcanzará el 1,50% y la de facilidad de préstamo, el 2,25%.

De esta forma, el precio del dinero se ha situado en su nivel más elevado desde enero de 2009, cuando el BCE inició una senda de estímulos a nivel monetario que se interrumpió brevemente en 2011, cuando decidieron volver a subir el precio del dinero durante unos meses.

El Consejo de Gobierno del BCE ha subrayado que con esta tercera subida consecutiva de los tipos ha logrado “un avance considerable en la reversión de la orientación acomodaticia de la política monetaria”. Pese a ello, la autoridad monetaria todavía prevé seguir subiendo los tipos para devolver la inflación al objetivo del 2%.

El instituto emisor ha mantenido su opinión de que la inflación “sigue siendo excesivamente elevada”. Además, ha justificado que su política monetaria de subir tipos “está orientada a reducir el apoyo a la demanda y proporcionar protección frente al riesgo de un desplazamiento persistente al alza de las expectativas de inflación”.

Por otro lado, el BCE tiene previsto recalibrar los términos y condiciones de su tercer programa de operaciones de refinanciación a largo plazo con objetivo específico (TLTRO III) para asegurarse de que es consistente con el proceso de normalización monetaria. El BCE ofrecerá a los bancos ajustar los tipos de interés aplicables, por lo que desde el 23 de noviembre se aplicará el tipo de interés medio del BCE aplicable durante el periodo. En este sentido, ofrecerá nuevas fechas a los bancos para devolver de forma anticipada las cantidades prestadas.

Asimismo, para alinear la remuneración de las reservas mínimas exigidas por el BCE a las instituciones de crédito con el estado actual de las condiciones del mercado monetaria, el BCE ha fijado la remuneración de dichas reservas en la tasa de depósito.

El BCE ha recordado que se seguirán reinvirtiendo los principales de la deuda vencida que haya sido comprada al amparo del programa de compras contra la pandemia (PEPP, por sus siglas en inglés) hasta finales de 2024. De su lado, las reinversiones del programa de activos públicos (APP, por sus siglas en inglés) se mantendrán durante un periodo de tiempo “extendido” desde que el BCE empezó a subir tipos (julio).

“La inflación sigue siendo demasiado alta”

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha justificado estas nuevas medidas para combatir la inflación en la zona euro. En la rueda de prensa posterior, ha defendido que la subida de tipos de interés se aplicará para “asegurar la vuelta a la inflación al objetivo de 2% a medio plazo”. “La inflación sigue siendo demasiado alta y estará por encima del objetivo”, ha advertido.

“La actividad económica se ha ralentizado mucho en el tercer trimestre y esperamos que se ralentice más en el último trimestre. La confianza de los consumidores y los negocios han bajado y eso afecta a la economía”, ha defendido.

Lagarde ha explicado que aunque se siguen creando empleos en el tercer trimestre, la debilitación de la economía podría derivar en “una tasa de paro más alta en el futuro”.

“Los Gobiernos tienen que tener unas políticas fiscales que muestren que están comprometidos para bajar la deuda pública. Las políticas tienen que ser para aumentar el potencial de crecimiento, contribuyendo a una reducción en la presión de los precios a medio plazo”, ha detallado.

Inflación y PIB de la zona euro

El producto interior bruto (PIB) de la zona euro registró un incremento intertrimestral del 0,8% en el segundo trimestre de 2022, una décima más que en los tres meses anteriores, de acuerdo a los últimos datos publicados por Eurostat, la oficina de estadística comunitaria.

Por otro lado, los precios registraron en el mes de septiembre una inflación del 9,9%, ocho décimas más que en el mes anterior, debido al incremento de los precios de la energía y de los alimentos, marcando su máxima desde que hay registros históricos.

Asimismo, la tasa interanual de inflación subyacente de los países que han adoptado el euro como moneda común, que es el resultado de excluir del cálculo la evolución de los precios de la energía, los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, se elevó en cinco décimas, hasta el 4,8%.

Con respecto al desempleo, la tasa de agosto de la zona euro, la última disponible, se mantuvo sin cambios en 6,6%. En el conjunto de la UE, el paro se situó en el 6%, también la misma cifra que el mes anterior.

El próximo encuentro el Consejo de Gobierno del organismo responsable de la política monetaria de la eurozona se celebrará el 15 de diciembre de 2022.

Adicae urge a la banca a ayudar a los consumidores

La Asociación de Usuarios de Bancos Cajas y Seguros (Adicae) ha urgido a la banca a aplicar medidas para ayudar a los consumidores presionados por el entorno económico actual, dado que la nueva subida de tipos muestra que el sector “sigue teniendo cuantiosos beneficios”.

“Adicae considera que el contexto de evolución de los tipos de interés justifica sobradamente que la banca afronte un esfuerzo real en las medidas a adoptar para ayudar a la situación de decenas o cientos de miles de hipotecados que pueden afrontar dificultades crecientes, mientras la banca declara incrementos de beneficios”, ha señalado en un comunicado.

El presidente de Adicae, Manuel Pardos, ha reprochado que sería “escandaloso” que el Ministerio de Asuntos Económicos permitiese a la banca hacer negocio a costa de la crisis hipotecaria, con una propuesta como la extensión de los plazos de las hipotecas.

Para la asociación, el principal problema derivado de las subidas de tipos y del Euríbor es el sobrecoste que añaden a los hipotecados en un contexto de escalada de los precios.