'El Chicle' vuelve al juzgado por la violación a su cuñada en 2005: las claves del proceso

'El Chicle' vuelve al juzgado por la violación a su cuñada en 2005: las claves del proceso

La atacó cuando apenas tenía 17 años, pero los peritos no creyeron su relato. La Guardia Civil logró reabrir el caso tras conectar el pasado de Abuín al crimen de Diana Quer.

José Enrique Abuín, en noviembre de 2019, durante el juicio por el asesinato de Diana Quer. Europa Press News via Getty Images

José Enrique Abuín Gey, alias El Chicle, que permanece en la prisión leonesa de Mansilla de las Mulas cumpliendo su condena a prisión permanente revisable por el asesinato de Diana Quer, volverá este martes al juzgado por una agresión sexual a su cuñada en enero de 2005, cuando ella tenía 17 años.

La Audiencia Provincial de A Coruña acoge la vista oral contra este hombre, que está previsto que declare al inicio del juicio, antes de que lo haga la denunciante, la hermana gemela de la que en el momento de la supuesta agresión era la mujer del acusado, con la que después tuvo una hija.

Tanto el Ministerio Público como la acusación particular piden 15 años de prisión en una causa que había sido sobreseída en 2005 pero que fue reabierta en marzo de 2018 después de que la jueza detectase similitudes entre este caso y el crimen de la joven madrileña Diana Quer, al coincidir el mismo modus operandi.

Los hechos

Según sostiene la Fiscalía, el acusado convenció a su cuñada para llevarla en coche al instituto, pero se desvió del trayecto hasta detener el turismo en un parque del término municipal de Lousame (A Coruña) y, una vez allí, le quitó el móvil y la intimidó con un cuchillo.

Fue entonces cuando la obligó a mantener relaciones sexuales, “siempre exhibiendo el cuchillo y llegando a deslizárselo por el cuerpo y presionar levemente con él para incrementar el temor” de su cuñada.

A efectos de evitar que lo denunciase y lo contase a los familiares que tenían en común, el encausado le dijo a la víctima que si lo denunciaba mataría a sus padres, a su hermana -esposa en aquel momento del acusado- y a ella misma.

Para la Fiscalía, los hechos relatados son constitutivos de un delito de agresión sexual con acceso carnal por vía vaginal por el que pide quince años de cárcel para este hombre que ya fue condenado a la máxima pena privativa de libertad por el crimen de Diana Quer.

En aquel momento, El Chicle se encontraba en prisión a la espera de juicio pero, según los informes del caso, logró eludir la cárcel tras convencer a dos psicólogos de que él no era realmente un agresor sexual sino una “víctima”. Los psicólogos, dos hombres especialistas en violencia de género, señalaron que El Chicle fue con ellos “afable y comunicativo” durante el encuentro. Además, apuntaron que José Enrique Abuín presentaba señales de sufrir una “paranoia” sobre el delito del que se le acusaba.

La valoración de los especialistas

En consecuencia, en el informe final, los psicólogos concluyeron que “presentaba una huella psíquica propia de una víctima” más que de un agresor sexual; añaden incluso que podría tener estrés postraumático. De esta forma, Abuín logró quedar en libertad tres meses y 27 días después de ingresar en la cárcel y el caso fue archivado. Mientras que, por el contrario, a la joven los expertos no le detectaron con claridad un perfil de víctima, no ven la “huella” de una violación. El Chicle volvió a la calle, primero se convirtió en traficante de drogas, luego en confidente y, más tarde, en asesino de Diana.

Ahora arranca el juicio porque El Chicle violó y mató a la joven madrileña, 11 años después de aquello. La supuesta víctima nunca había retirado su denuncia, siempre defendió que su cuñado la había violado y, cuando los investigadores vieron los antecedentes de Abuín, se encontraron con este caso supuestamente cerrado por la justicia. Era un caso muy parecido al de Diana: chica joven, amenazada con un cuchillo, al que le quita el teléfono, en una zona apartada... Y la Guardia Civil entiende que hay que revisar los asuntos pendientes de El Chicle, entre otros este, y el caso avanza, se reabre y no prescribe, cuando sólo quedaban dos años para que se cerrara en falso.