El documental alemán de Netflix que habla sin tapujos del "déspota de baja estatura" Franco

El documental alemán de Netflix que habla sin tapujos del "déspota de baja estatura" Franco

'La dura verdad sobre la dictadura de Franco' explica en cinco capítulos los 40 años de "terror" del dictador en España.

Captura de la intro de 'La dura verdad sobre la dictadura de Franco'.NETFLIX

Francisco es tímido y es un estudiante mediocre”, el padre de Franco es “un vividor que no pasaba mucho por casa”, tenía una madre “dominante” y se burlaban de él por su “baja estatura”.

Estas son algunas de las reflexiones y comentarios que se pueden escuchar —en alemán, eso sí, porque no está doblado al español aunque sí está subtitulado— en La dura verdad sobre la dictadura de Franco, un documental alemán de la cadena pública germana ZDF que se ha colado en las tendencias de Netflix en España.

En cinco episodios, historiadores como Paul Preston y Ángel Viñas analizan lo que fueron cuarenta años de dictadura y cómo el pueblo español pudo subsistir siendo un país desolado por la guerra, el hambre y el aislamiento económico.

Sorprende de esta pieza cinematográfica que los alemanes no se andan con rodeos y son claros a la hora de hablar de cómo era realmente Franco en la intimidad. Paul Preston, biógrafo de Franco, llega a decir que el dictador tenía “una característica única”: “No le interesaba el sexo”.

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Como explica el historiador británico Antony Beevor, Franco era “un asesino a sangre fría” y cuenta que en una ocasión llegó a matar a un soldado simplemente por salirse de la formación: “Cuentan que, con su voz aguda y su corta estatura, una vez dio una orden y un soldado salió de la fila. Franco sacó una pistola y le disparó”.

Un matrimonio fructífero

El documental también se centra en Carmen Polo, mujer del caudillo, madre de su única hija y conocida en toda España como “la collares” por sus ostentosos collares de perlas. Revela Preston que la familia de Polo “entra en cólera” cuando se entera de que su hija va a contraer matrimonio con un soldado. “Su padre le dijo: ‘no lo hagas, es peor que casarte con un torero’”, cuenta el biógrafo del dictador.

Durante los cinco capítulos, sobre todo a la hora de hablar de los aspectos más personales de Franco, se habla sin rodeos de los nulos gustos sexuales del dictador y de que su hija Carmencita podría no ser su hija.

“La pareja tiene una hija, Carmencita, pero pronto corre el rumor de que esa hija no es de Franco, sino de Ramón, su hermano pequeño, y que la madre no es Carmen Polo, sino una prostituta”, se dice literalmente en el capítulo. Añade Preston que a Carmen Polo “nunca se la vio embarazada” y habla de que hay pruebas claras “de que a Franco no le interesaba el sexo”.

Les llama la atención a los alemanes el papel que jugaba su esposa dentro del entramado clientelar que se formó alrededor de la figura del dictador, donde todos los que estaban cerca sacaban tajada económica mientras el pueblo se moría literalmente de hambre. Sostiene Viñas: ”Él era un corrupto y, por lo tanto, le parecía normal sobornar a otros”.

“Preferiría que me quitaran tres dientes sin anestesia a hablar una hora más con Franco”
Adolf Hitler

Tras analizar lo cruenta que fue la Guerra Civil Española, la narradora reflexiona sobre la doble moral del matrimonio: ”¿Cómo pueden Franco, cristiano, y su mujer, estrictamente católica, vivir entre tanto sufrimiento y muerte?”.

Para ahondar un poco en cómo era realmente Polo se cuenta una anécdota estremecedora. Se dice que personas cercanas a Polo le pedían ayuda para que intercediese ante su marido para evitar fusilamientos y sanciones, pero ella no estaba por la labor y respondía: “Paco está muy ocupado como para molestarlo por algo así”. “No hizo nada para detener su crueldad”.

Hitler conoce a Franco

Deja bastante claro el documental que Franco gana la guerra gracias a la ayuda de la Alemania nazi y del fascismo italiano. El general español y Hitler se reunieron en Hendaya en 1940 para hablar de una posible intervención española en la Segunda Guerra Mundial, reunión que acabó como el rosario de la aurora.

El dictador español hace esperar a Hitler en el andén de la estación de tren de la ciudad, algo que enervó al líder nazi. Ambos tuvieron una reunión que duró nueve horas y que en uno de los capítulos se resume así: “El terco español vuelve loco a Hitler”.

Su intérprete, Paul Schmidt, escribió que Hitler dijo de Franco: “Preferiría que me quitaran tres dientes sin anestesia a hablar una hora más con Franco”. Un sentimiento recíproco ya que el dictador español dijo algo similar de su encuentro con sus homólogos alemanes.

La implacable represión de Franco es el arco argumental de la obra. No tienen reparos en definir estos años de dictadura como “reino de terror”. Hasta los nazis alemanes y los fascistas italianos se asombran de la “crueldad” del dictador español que gobernó con mano de hierro España durante 40 años.

En 1950, para levantar el ánimo decaído de los españoles, se estrena la película Raza. Explica Preston que Franco fue el artífice del borrador del guion, que firmó con pseudónimo. “Se dice que veía la película una vez a la semana llorando a borbotones”, explica.

  Hitler conoce a Franco en Berlin 1936. (Universal History Archive/Universal Images Group via Getty Images)Universal History Archive via Getty Images

Define la narradora de la cadena pública alemana a Franco como “un déspota con baja estatura pero con mucho deseo de poder”. Antes de llegar a ser generalísimo, dice Preston, era imposible conversar con Franco porque no había forma de que cerrase la boca. Una vez en la cúspide, esto fue a más porque ya nadie se atrevía a decirle que parase.

Franco llega al poder y traslada su vivienda al palacio del Pardo, lugar de residencia de los reyes, algo que ven en Alemania como “megalomanía en todo su esplendor”.

Evita Perón vs. Carmen Polo

Los primeros años de dictadura son terroríficos. Además de la cruenta represión contra los que no pensaban como él, la población española se muere de hambre. Nadie quiere colaborar con el régimen franquista y el dictador encuentra apoyo en la Argentina de Perón, que envía trigo y accede a conceder préstamos a España.

Muestra de esa buena relación entre los dos países es la visita de Evita Perón a España en junio de 1947. Esta fue la primera visita de Estado que recibió la dictadura pero el documental no se centra solo en eso. La belleza y el carisma de la mujer del general argentino pone celosa a Carmen Polo, que saca “sus mejores pieles” en pleno verano.

Dice Preston sin cortarse un pelo: “A pesar de las dudas existentes, a Franco le gustaban las mujeres y su mujer lo sabía”.

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, los historiadores analizan la personalidad de Carmen Polo. Cuentan que la mujer del dictador iba a las joyerías más exclusivas del país, se llevaba todo lo que le daba la gana y luego decía “mándame la factura”. Si alguien osaba mandarle el ticket recibía a los pocos días una auditoría por parte de la autoridad fiscal.

“A pesar de las dudas existentes, a Franco le gustaban las mujeres y su mujer lo sabía”
Paul Preston

Al final de su vida, con el país ya ansioso de libertad, Franco deja el poder del Estado en manos del almirante Carrero Blanco, asesinado por ETA de un bombazo en 1973 mientras pasaba por una calle de Madrid en coche para ir a misa.

Los últimos años de Franco

Dice Preston que antes de la muerte de Carrero Blanco el dictador pasa bastante de los asuntos políticos del país y se dedica exclusivamente a pescar, cazar y ver la televisión. De hecho, tanto le gusta ver la tele que tiene nada más y nada menos que 17: “La propaganda no habla del excesivo hábito de Franco de ver la tele. En su lugar prefiere mostrar su éxitos en caza y pesca”.

El documental alemán ensalza la figura de Juan Carlos, en esos años príncipe, y de cómo actuó “con inteligencia” para hacer creer al dictador que iba a continuar con su legado. “Como Franco, no mostró sus verdaderas ideas y dejó que creyera que continuaría liderando el país como él”, explica el historiador Antony Beevor.

Tras la muerte de Franco, el documental pone de manifiesto las dudas que había en el país con Juan Carlos: los partidarios del dictador no se fiaban de él y los antifranquistas lo veían como “un discípulo real” del régimen. “Los de izquierdas lo llamábamos Juan Carlos el Breve”, señala Francesc de Carreras.

Y la narradora apostilla: "Pronto se hace patente que Juan Carlos de ningún modo es un agente de su mentor fallecido. Más bien lo contrario”. En 1977, después de 40 años de dictadura, se celebran elecciones libres en España y Adolfo Suárez se convierte en el primer presidente de la democracia.

Una dictadura que pudo volver a España con el Golpe de Estado de 1981. Un momento que la historiadora Carmen Iglesias recuerda primero con miedo y luego, tras la comparecencia del rey, con alivio: “Temíamos volver en una dictadura y guerra civil que todos queríamos dejar atrás”.

Más allá de anécdotas personales sobre la vida de Franco y de Carmen Polo, si hay algo que este documental deja claro es que la dictadura franquista fue un “reino de terror” y el caudillo un “asesino a sangre fría” al que no le tembló jamás la mano a la hora de matar a todo aquel que no pensase como él.

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