El presidente de Uganda dice que el 40% de las personas hospitalizadas en el país mueren por 'comer demasiado'

El presidente de Uganda dice que el 40% de las personas hospitalizadas en el país mueren por 'comer demasiado'

En diciembre señaló que "la obesidad es un signo de corrupción".

Hambruna en África.EFE

El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, ha afirmado que el 40 por ciento de las personas que mueren en hospitales del país lo hacen por “comer demasiado”, en el marco de una marcha de varios días recorriendo los caminos usados por su guerrilla cuando se hicieron con el poder en 1986.

“El 40 por ciento de la gente que muere en los hospitales muere por lo que llamamos enfermedades no transmisibles. Mueren por comer demasiado, el 40 por ciento”, ha subrayado.

Asimismo, ha urgido a la población a abrir alojamientos en colinas y zonas montañosas para que los “magnates que mueren noche y día por comer mucho” vayan allí a hacer ejercicio.

Museveni inició el sábado una marcha de casi 200 kilómetros desde Galamba, al norte de la capital, hacia Birembo, donde tuvo lugar una de las principales batallas en las que los rebeldes depusieron a Milton Obote.

El propio presidente ugandés señaló en diciembre que “la obesidad es un signo de corrupción” y sostuvo que los corruptos “son parásitos porque se alimentan con aquello por lo que no han trabajado”.

“El aumento de los casos de diabetes y los problemas coronarios, especialmente en las zonas urbanas, es porque la gente come demasiado y no hace ejercicio”, argumentó entonces.

Museveni publicó días antes un mensaje en su blog personal en el que confirmó que había hecho una dieta para perder cerca de 30 kilogramos y negó encontrarse mal de salud. De esta forma, ha pasado de pesar 106 a 76 kilos, según manifestó.“No estoy cansado para nada. He perdido peso de forma deliberada deshaciéndome de la grasa que permití que se acumulara en mi cuerpo porque los médicos no nos habían explicado claramente el error de no luchar contra la grasa”, apuntó.

En el cargo desde 1986

Museveni, uno de los mandatarios de África que más tiempo lleva en el cargo ―desde 1986―, obtuvo un nuevo mandato de cinco años en 2016 en unas elecciones que la oposición consideró fraudulentas, extremo que él niega.

Los críticos le acusan de utilizar las fuerzas de seguridad y el poder judicial para reprimir a la oposición y aseguran que las autoridades del Gobierno no son castigadas por los casos de corrupción.

El encarcelamiento de líderes opositores forma parte de la rutina de las fuerzas de seguridad, que en muchas ocasiones han sido criticadas por su extrema dureza a la hora de reprimir las protestas y manifestaciones.