El ruego de Àngels Barceló ante la expansión del coronavirus en España: "Si solo te pudiera decir una cosa..."

El ruego de Àngels Barceló ante la expansión del coronavirus en España: "Si solo te pudiera decir una cosa..."

“Una situación sin precedentes”

La periodista Àngels Barceló.CADENA SER

España ya es, junto con EEUU, el país donde más rápido se extiende el coronavirus en el mundo. En este contexto de expansión de la enfermedad, que ha dejado ya más de 3.000 positivos en España (con 84 fallecimientos), la periodista Àngels Barceló ha hecho un doble llamamiento, casi un doble ruego.

Por un lado, la primera petición va dirigida a todos los españoles: “Si hoy solo les pudiera decir una cosa les diría, quédense en casa, quédate en casa”, ha pedido la periodista, quien ha hecho un llamamiento a la calma y la responsabilidad ante “una situación sin precedentes”.

En este sentido, Barceló ha recordado que “hay gente que sigue trabajando para garantizar nuestra tranquilidad”: “Los primeros, los médicos y todo el personal sanitario, desbordado, exhausto pero cubriendo, como desde hace mucho tiempo, con su entrega las deficiencias de una sanidad esquilmada por tantos años de recortes”, ha recordado la periodista.

Barceló ha resaltado que el coste económico está siendo y va a ser tremendo, “por lo que es muy importante que la crisis dure lo menos posible en el tiempo”.

Por otro lado, la periodista ha mirado hacia el líder de la oposición, el popular Pablo Casado, a quien le ha recordado que “no todo vale”: “No vale cuestionar al Gobierno en un momento como éste, que esto va de la gestión de una crisis con unas características inéditas, que puede hacer electoralismo con lo que quiera, pero no con esto. Ya habrá tiempo”, ha afirmado.

“Solo hay un opción: remar en la misma dirección”, ha sentenciado.

Remar en la misma dirección

Si hoy solo les pudiera decir una cosa les diría, quédense en casa, quédate en casa. Abordemos con calma y con responsabilidad una situación sin precedentes. Hay gente que sigue trabajando para garantizar nuestra tranquilidad. Los primeros, los médicos y todo el personal sanitario, desbordado, exhausto pero cubriendo, como desde hace mucho tiempo, con su entrega las deficiencias de una sanidad esquilmada por tantos años de recortes.

Pero hay más, esta madrugada, cuando venía a la radio, la panadería de mi barrio ya tenía las luces del obrado encendidas, ya estaban haciendo pan, y en el supermercado, un ‘Dia’, los reponedores volvían a llenar las estanterías. Y nosotros estamos aquí, para contarles, para informarles y también para acompañarles para acompañarnos en momentos de incertidumbre. Quedémonos tranquilos en casa.

Nos quedamos en casa, aparcamos por un tiempo nuestra vida al aire libre y esa afición tan nuestra de socializar. Hay restaurantes que ya han cerrado por iniciativa propia y ayer en Madrid nos pidieron que no fuéramos a las terrazas ni a los parques.

El coste económico de esto está siendo y va a ser tremendo, por lo que es muy importante que la crisis dure lo menos posible en el tiempo. Miremos a China, donde hoy celebran el paso de la epidemia. aquello que nos parecía impensable, ciudades y ciudadanos confinados, tiene que ser una realidad aquí, porque funciona.

Y si solo pudiera decir otra cosa, le diría a Pablo Casado que no todo vale. Que no vale cuestionar al Gobierno en un momento como este, que esto va de la gestión de una crisis con unas características inéditas, que puede hacer electoralismo con lo que quiera, pero no con esto. Ya habrá tiempo, cuando volvamos a salir a la calle, de analiza, valorar, cuestionar cómo se ha hecho, y habrá seguro otra convocatoria electoral que juzgará a quienes han estado al frente de la crisis, pero, mientras, solo hay un opción, remar en la misma dirección. Esa responsabilidad que nos piden a los ciudadanos se la debería aplicar él. La gestión de la crisis también requiere calma política.

No se olviden, quédense en casa.