¿Es cierto que lo peor ya ha pasado? Esto dice la 'curva' de la tercera ola en Europa

¿Es cierto que lo peor ya ha pasado? Esto dice la 'curva' de la tercera ola en Europa

España no es el único país que ha marcado sus peores datos recientemente, pero hay políticas muy diferentes para superarlos.

Una sanitaria se prepara para hacer un test frente al Ayuntamiento de ParísChristian Hartmann / Reuters

Después de dos semanas oyéndolo, parece que ahora sí, lo peor de la tercera ola “ya ha pasado” en España. O eso dicen las autoridades sanitarias, que de inmediato matizan que seguimos en “riesgo extremo”. Los datos de este lunes, como muestra, han sido los mejores de las últimas semanas, después de picos máximos en casos y muertes desde abril.

La fotografía de la pandemia marca un descenso relativo de la curva; los positivos de un día para otro crecen cada vez menos, aunque el peligro de “aliviar” las restricciones y volver a vivir lo que ya pasó tras el verano y tras Navidad está muy presente. Los muertos, además, no dejan de contarse por centenas jornada tras jornada. De superado, nada”

La estadística comparada de España y sus principales vecinos europeos evidencian similitudes en varias métricas, como los nuevos contagios, los fallecidos o el ritmo de vacunación. Sin embargo, cada país tiene sus problemáticas y sus políticas para hacer frente al virus. Las gráficas dan buena muestra de ello.

Entre confinamientos y desescaladas lentas

En España el Gobierno negó una y otra vez un segundo confinamiento domiciliario. Aquí si hay grandes diferencias con otras naciones. En Reino Unido, que ya ha pasado por un ‘cierre’ hasta tres veces en varios de sus territorios, los ciudadanos ya comienzan a ver la luz, pero aún al fondo. Boris Johnson ha apuntado que el avance de la vacunación y la bajada de la transmisión del virus marcan un “cauteloso pero irreversible avance” hacia el final del confinamiento y podría definir las fechas de una nueva desescalada el próximo lunes 22.

Alemania, después de semanas también bajo permanencia en casa y cierre de escuelas y comercios no esenciales, encara otra suave transición a la desescalada. En las próximas semanas se irán reabriendo centros escolares, pero la actividad no esencial se mantendrá clausurada hasta, por lo menos, la primera de marzo, cuando progresivamente irán abriendo distintos negocios. El confinamiento previsto hasta el 14 de febrero, por el momento, se mantiene.

En Portugal la estrategia pasa por no salvar nada a corto plazo, salvo vidas, después de verse al límite del colapso. Los ciudadanos lusos llevan confinados cerca de un mes (y su frontera con España cerrada) y se prevé que sigan así hasta, posiblemente, Semana Santa. Su estrategia choca con Francia o Italia, que apuestan por no “reconfinar” aunque se mantengan medidas duras para limitar la vida social o la actividad comercial.

La mortalidad de la tercera ola

El caso más llamativo es el de Reino Unido, cuya curva se desploma después de moverse en picos de 1.200 decesos diarios. La última información reporta 658 víctimas mortales.

Esa tendencia descendente también la evidencian Alemania, Italia o Portugal, después de reportar sus máximos recientes hace un par de semanas, como ocurrió en España.

Decenas de miles de casos al día

Con respecto a los positivos, la imagen en el Viejo Continente es parecida entre sus principales países. Los nuevos casos se frenan con respecto a semanas atrás. Es especialmente significativo el aplanamiento de la curva británica, que junto a Rusia está a la cabeza del total de contagios, ambos por encima de los cuatro millones (reconocidos oficialmente por sus autoridades).

España es el cuarto país entre los ‘pesos pesados’ europeos en cantidad de diagnósticos conocidos, con algo más de tres millones (también le supera Francia, que roza los 3,5).

Por detrás, Alemania (2,3 millones), Portugal o Bélgica (ambos rondando el medio millón) estabilizan sus registros y muestran una evolución sin picos desde hace tiempo, fruto de las medidas restrictivas.

La vacunación acelera para llegar al objetivo marcado

Las vacunas siguen siendo el gran campo de batalla contra el virus. Las nuevas cepas han disparado los miedos, que ya eran muchos, y hasta la Comisión Europea ha puesto una fecha límite para su objetivo de tener el 70% de los adultos vacunados. El 21 de septiembre, día que acaba el verano. Ese es el margen que da Ursula von der Leyen a sus 27 Miembros.

Para ello se dispondrá de, al menos, tres medicamentos distintos (Pfizer, Moderna y AstraZeneca), a los que muy pronto se espera que se sume el de Janssen y podrían llegar más en semanas.

El 21 de septiembre, posiblemente Reino Unido ya lleve mucho tiempo con ese umbral conseguido. A mediados de febrero ya han administrado casi 16 millones de dosis (su población es de 66 millones), a años luz del resto de ‘vecinos’. Los británicos fueron los primeros en administrar la vacuna de Pfizer en Europa y su ritmo sigue siendo superior al resto.

Muy, muy lejos de las islas, la fotografía muestra similitudes entre el resto, aunque Alemania (más de cuatro millones) y Rusia se desmarcan por su mayor ritmo de administración, especialmente desde el comienzo de mes.

España también va acelerando tras un comienzo con problemas y ralentizaciones. Son ya más de 2,56 los viales puestos desde que comenzó la campaña, en cifras ligeramente inferiores a Francia e Italia.