¿Es normal hablar solos?

¿Es normal hablar solos?

Muchas veces se asocia a problemas mentales, pero estos no suelen ser el motivo por el que una persona habla sola.

Hablar soloCSA-PRINTSTOCK VIA GETTY IMAGES

Como adulto, es probable que en algún momento de tu vida hayas hablado contigo mismo en voz alta o en tu mente. Algunas personas lo hacen por costumbre y les resulta útil. Pero seguramente te preguntas si es algo normal, bueno o incluso malo.

“Es completamente normal y, por tanto, muy común, hablar solos”, asegura la doctora en psicoterapia Laura F. Dabney. No es una costumbre que haya que superar ni un síntoma de problemas mentales. Es más común de lo que parece.

“Lo cierto es que todos hablamos con nosotros mismos”, sostiene Vironika Tugaleva, autora de The Art of Talking to Yourself. Quizás sea raro que lo hagas en voz alta en un lugar público, pero todos tenermos conversaciones a distinto nivel en nuestra mente para dar sentido a los sucesos del día a día. 

Piensa en escenarios rutinarios en los que hables contigo mismo, como cuando sales de casa y te dices antes de cerrar la puerta: llaves, abrigo, bolso, comida, como si fuera un listado que tienes que ir tachando, compara Dabney. O cuando estás volviendo a casa y le das vueltas a una conversación tensa que has mantenido con tu jefe.

“No solo es normal, es fundamental, y tener en cuenta la calidad de este diálogo interno es un modo de acercarte a la felicidad y a sentirte realizado”, indica Tugaleva.

Hablar contigo mismo tiene sus beneficios

Tener el hábito de hablar solos es sano y útil, afirma Sheri McGregor, asesora personal y autora de Done With The Crying.

McGregor trabaja con padres que intentan tratar el aislamiento de sus hijos y sostiene que hablar solos de forma positiva es útil para cualquier persona que esté pasando por una mala época.

“Les digo a mis clientes y lectores que hablar solos de forma cariñosa es un modo de mimarse a sí mismos”, expone. Es una forma de calmarte y centrarte en lo positivo y no en lo que te estresa y te preocupa.

Es en los momentos duros cuando la gente más suele hablar sola. Por ejemplo, cuando tratas de superar una situación sentimental complicada o intentas gestionar emociones fuertes, señala Itamar Shatz, doctorando en Lingüística en la Universidad de Cambridge del Reino Unido.

Habla contigo mismo sobre los problemas del día a día

Hablar solos es un modo de recordarnos tareas pendientes o de afrontar problemas menores, comenta McGregor.

La próxima vez que estés nervioso antes de hablar en público, habla contigo mismo para olvidarte de tus miedos y propón soluciones o recuérdate lo preparado que estás. Eso sí, no hables solo si vas a sabotearte o a ahondar en tus preocupaciones.

Conviértelo en una práctica productiva utilizando métodos de autodistanciamiento como referirte a ti mismo en segunda o tercera persona, sugiere Shatz, que ha investigado esta área de estudio.

“Por ejemplo, si tienes ansiedad antes de hablar en público, en vez de preguntarte: ‘¿Por qué estoy tan nervioso?‘, pregúntate: ‘¿Por qué estás tan nervioso?’ o ’¿Por qué está Jane tan nerviosa?”, propone.

“Los estudios demuestran que hablarte así te permite ver la situación desde una perspectiva más neutral, lo cual mejora tu capacidad de gestionar tus emociones y tomar decisiones racionales”, explica.

Es bueno que lo conviertas en un hábito

De hecho, hablar solos es una forma de mindfulness, una práctica cada vez más popular.

“El mindfulness es lo principal porque te hace ser consciente no solo de tus pensamientos, sino también de las palabras que te dices”, afirma McGregor.

En los momentos más duros, la mente puede llevarte a lugares muy oscuros y por eso el hábito de hablarse de forma positiva o de meditar es un esfuerzo, pero merece la pena fomentar esta práctica.

“Como hablar solos no tiene ninguna consecuencia negativa, sería buena idea convertirlo en un hábito”, sostiene Dabney. Esta psicoterapeuta recomienda escoger un momento o un lugar cada día para hablar solos de forma que te acostumbres a hacerlo siempre en ese momento o lugar. Prueba a hablar contigo después de un episodio estresante y observa qué te ayuda y qué no para ayudarte a sentirte mejor. 

“Toma nota mentalmente de su eficacia o escribe un diario durante una semana para acordarte de lo que te ha resultado más útil”, aconseja.

Hablar solos se asocia a menudo a problemas mentales, pero estos no suelen ser el motivo por el que una persona habla sola. No obstante, hay ciertas situaciones en las que hablar solos sí puede ser un indicio de un problema psicológico.

Cuando una persona habla sola y además se autolesiona, es señal de que tiene un problema emocional, advierte Dabney. Asimismo, si una persona habla sola y no para de decir frases repetitivas, mantras o números y no puede parar, tal vez se deba a un problema emocional. En cualquiera de estos casos, lo mejor es hablarlo con un profesional para recibir el mejor asesoramiento posible.

Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Canadá y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.