España, fuera del 'top ten' de los países con mejores políticas de conciliación

España, fuera del 'top ten' de los países con mejores políticas de conciliación

España ocupa el puesto número 14 y Suiza, Grecia, Chipre, el Reino Unido e Irlanda ocupan los últimos puestos. Estonia ofrece a las madres el permiso con sueldo completo de mayor duración, 85 semanas.

Cavan Images via Getty Images

Suecia, Noruega, Islandia, Estonia y Portugal ofrecen las mejores políticas de apoyo a la familia entre los 31 países más ricos con datos disponibles, según el nuevo informe de UNICEF ¿Son los países ricos más favorables a las familias? Análisis de las políticas de conciliación en la OCDE y la UE. España ocupa el puesto número 14 y Suiza, Grecia, Chipre, el Reino Unido e Irlanda ocupan los últimos puestos.

Producido por la Oficina de Investigación de UNICEF-Innocenti, el informe clasifica a los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Unión Europea (UE) según sus políticas nacionales de conciliación. Estas políticas incluyen la duración del permiso parental con sueldo completo equivalente y los servicios de cuidado y educación infantil para niños de entre 0 y 6 años.

España ha obtenido una puntuación de 15, lo que supone 8,7 puntos menos que Suecia, que se sitúa en primer lugar con 7,2, y 13,7 más que Suiza, que ocupa el último lugar de la tabla.

El informe forma parte de la política y la labor programática de UNICEF en torno al desarrollo en la primera infancia, así como de la campaña La primera infancia importa, lanzada hace tres años para ayudar a las familias a proporcionar a sus hijos de corta edad un entorno propicio y ofrecerles las experiencias necesarias para que sus cerebros se desarrollen de forma saludable.

“Necesitamos apoyo e influencia”

“No hay momento más importante para el desarrollo del cerebro de los niños -y por lo tanto de su futuro- que los primeros años de vida ―asegura la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore―. Necesitamos que los gobiernos ayuden a proporcionar a los padres el apoyo que necesitan para crear un entorno propicio para sus hijos pequeños. Y necesitamos el apoyo y la influencia del sector privado para que esto suceda”.

UNICEF promueve un mínimo de seis meses de permiso parental remunerado y el acceso universal a servicios de cuidado y educación asequibles y de calidad desde el nacimiento hasta el ingreso de los niños en la escuela; además, la organización colabora con los gobiernos, la sociedad civil, el mundo académico y el sector privado -que desempeña un papel importante influyendo en las políticas- para fomentar una mayor inversión en las familias.

Al examinar más detalladamente los permisos de paternidad y maternidad con sueldo completo equivalente en 41 países, la publicación refleja que solo la mitad de los países ofrecen al menos seis meses de permiso con sueldo completo para las madres.

Estonia, entre los mejores

Estonia ofrece a las madres el permiso con sueldo completo de mayor duración, 85 semanas, seguida de Hungría (72 semanas) y Bulgaria (61 semanas). Estados Unidos es el único país incluido en el análisis que no cuenta con una política nacional de permisos remunerados para madres o padres. El rol de los padres en estos modelos es menos visible.

España, con 16 semanas de permiso retribuido para las madres y 2 para los padres, según el análisis realizado en 2016 ―ahora es de 8 semanas―, que refleja los avances producidos en muchos países, entre ellos el nuestro), se situaba entonces en los puestos 27 y 17, respectivamente, en esta medida concreta.

El texto también muestra que, en algunos casos, aunque los padres tengan derecho a un permiso remunerado, no lo disfrutan. En Japón, el único país que ofrece al menos seis meses de salario completo para los padres, solo 1 de cada 20 lo utilizó en 2017. La República de Corea es el segundo país que ofrece mayor tiempo a los padres, pero solamente 1 de cada 6 se acogió al permiso por nacimiento de un hijo.

El coste económico, una razón de peso

Además, según datos de 29 países, los padres y madres de niños pequeños en el Reino Unido, seguidos de los de España, son los más propensos a citar el coste económico como la razón por la que no utilizan más las escuelas infantiles. Sin embargo, en la República Checa, Dinamarca y Suecia, el coste solo era un problema para menos de 1 de cada 100 padres y madres.

En España, donde no hay un acceso universal a la educación en la etapa 0-3 años, el 39% de los niños en ese tramo de edad acude a una escuela infantil, dato que, según el análisis del informe, sitúa al país en el puesto 11 de 31.

Entre las recomendaciones del organismo para mejorar la conciliación, está proporcionar a los progenitores un permiso parental remunerado de al menos seis meses; permitir que todos los niños tengan acceso a centros de educación infantil de alta calidad, apropiados para su edad, asequibles y accesibles, independientemente de las circunstancias familiares; y garantizar que no se produce una brecha entre el final del permiso parental y el inicio del cuidado en una escuela infantil asequible, de modo que los niños puedan seguir su desarrollo sin interrupciones.

Además, sugiere que se asegure que las madres puedan amamantar a sus hijos antes y después de regresar al trabajo, concediéndoles un permiso lo suficientemente amplio y remunerado, pausas en el trabajo y lugares seguros y apropiados para amamantarlos y extraer leche materna; y recopilar más y mejores datos sobre todos los aspectos de las políticas favorables a la familia, a fin de poder supervisar los programas y las políticas y comparar los datos entre los países.

Aunque unos países aparecen mejor en el ranking, el informe concluye que incluso en los países de rentas más altas las políticas de conciliación no han llegado a contemplar soluciones integrales para las familias. Por ello, apuesta por el reparto de cuidado igualando los permisos de paternidad a los de maternidad y aumentando los permisos de lactancia a 6 meses, así como por promover una mayor equidad en esas políticas a través de una mayor inversión en servicios públicos y una mayor accesibilidad y universalidad de la educación 0-3.