España y otros cuatro países de la UE acogerán a los migrantes rescatados por el Open Arms

España y otros cuatro países de la UE acogerán a los migrantes rescatados por el Open Arms

El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, pide a Madrid que se haga cargo y acelere el mecanismo de distribución.

Open ArmsREUTERS

Cinco países de la Unión Europea, entre ellos España, han confirmado su disposición para acoger a las personas rescatadas por el buque humanitario de la ONG española Open Arms en aguas del Mediterráneo Central. Así lo ha ratificado este miércoles la Comisión Europea, que ha insistido en que está “preparada” para comenzar a coordinar este proceso pero no ha querido detallar cuántas personas serán enviadas a cada país.

Los migrantes del navío “Open Arms” desembarcados en Lampedusa esperan a conocer su futuro, mientras el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, pide a Madrid que se haga cargo y acelere el mecanismo de distribución.

“El Ministerio del Interior renueva la petición a España para que se haga cargo de los inmigrantes desembarcados del ‘Open Arms’. El ministerio espera que la Comisión Europea, de acuerdo con el Gobierno de España, que ya había puesto a disposición sus puertos para recibir la nave, pongan en marcha el mecanismo”, ha señalado este miércoles a través de un comunicado Salvini.

Nave española, ONG española, es correcta la decisión de enviar una nave militar hacia España
Matteo Salvini

“Nave española, ONG española, es correcta la decisión de enviar una nave militar hacia España”, ha agregado.

Los migrantes -más de un centenar entre los 83 desembarcados anoche, unos 20 que se tiraron al mar y los evacuados por razones médicas-, que vivieron 19 días hacinados en la cubierta del barco tras ser rescatados en el Mediterráneo entre el 1 y el 10 de agosto, pasaron su primera noche en un centro de acogida en la isla italiana después de haber sido examinados por médicos en el mismo muelle.

Pasada la medianoche del martes, terminaba el desembarco, ordenado por la Fiscalía de Agrigento (Sicilia), que también determinó la incautación temporal del barco humanitario español por dos semanas.

Mientras los migrantes eran trasladados a ese centro de acogida, el “Open Arms” partió en la madrugada del puerto de Lampedusa al de Emepedocle, en Sicilia, como ha determinado el fiscal y adonde llegará esta noche.

Los siguientes pasos

Se espera que los migrantes sean trasladados los próximos días a Sicilia desde el centro de acogida de Lampedusa, para esperar allí que se resuelva la distribución entre España, Francia, Alemania, Luxemburgo y Portugal, los cinco países que han ofrecido recibirlos.

En el caso de los que vayan a España, el buque “Audaz” de la Armada española, que zarpó ayer hacia Lampedusa, en un principio para hacerse cargo de los migrantes rescatados por el “Open Arms” y acompañar a este barco a Mallorca, sería probablemente el que los llevara, ya que continúa su travesía hacia Italia.

La odisea humana de estos náufragos rescatados en el Mediterráneo por el “Open Arms” ha concluido así al menos de momento, no así las implicaciones políticas de esta larga crisis.

El fiscal de Agrigento, del que depende Lampedusa, Luigi Patronaggio, que ordenó el desembarco tras subir ayer a bordo con varios médicos, está investigando la supuesta “denegación y omisión de los registros oficiales”, aún en contra de personas desconocidas.

La investigación

“Es necesario verificar si la situación de emergencia, que surgió después de la estadía durante varios días del barco ‘Open Arms’ en aguas nacionales y confirmada por los médicos durante la inspección, es el resultado de la negativa de las autoridades competentes a emitir las medidas necesarias por razones de higiene y salud”, escribe el fiscal en su orden.

El artículo 328 del Código Penal castiga con entre seis meses y dos años al funcionario público que haya omitido su deber, que “por razones de justicia o de seguridad pública, o de orden público o de higiene y salud, debe ser cumplido sin retraso”.

Patronaggio también destacó “la falta de asignación de un puerto seguro al buque ‘Open Arms’ por parte de las autoridades italianas, incluso después de la disposición del tribunal del Lazio que autorizó la entrada del buque en aguas territoriales”.

Para el fiscal, esa situación determinó la exasperación de los migrantes y “culminó con el intento de numerosos de ellos de tirarse al mar para llegar a las costas de Lampedusa”.

La investigación aún no está dirigida contra nadie en concreto, pero a nadie se escapa que la imposibilidad de desembarcar se debió a la firme negativa del ministro del Interior, Matteo Salvini.

El líder ultraderechista fue criticado con dureza ayer en el Senado por su intransigencia por los distintos dirigentes políticos, durante el debate de la crisis política que ha desembocado en la dimisión del primer ministro.

Ya hace un año Salvini fue investigado por supuesto “secuestro de personas”, por haber impedido desembarcar a más de cien migrantes recogidos por un barco militar italiano y que estuvieron días bloqueados en puerto, pero le salvó su socio de Gobierno, el Movimiento 5 Estrellas, que no aprobó el levantamiento de su inmunidad.

Ahora las tornas han cambiado, y con la coalición de Gobierno rota por el órdago que el propio Salvini lanzó este verano pidiendo elecciones -envalentonado por los sondeos favorables- el líder de la Liga está más aislado que nunca en Italia.