La familia real de Dubai afirma que la princesa Latifa está atendida "en casa", pero no muestra imágenes de ella

La familia real de Dubai afirma que la princesa Latifa está atendida "en casa", pero no muestra imágenes de ella

"Tenemos la esperanza de que regrese a la vida pública en el momento apropiado”, han apuntado tras el vídeo de la princesa en la que denunciaba ser rehén de su padre

La princesa Latifa al MaktumREUTERS

La familia real de Dubai ha anunciado que la princesa Latifa al Maktum, hija del emir, “está siendo atendida en casa” después de que la BBC emitiese varios vídeos en los que denunciaba estar retenida en una mansión a manos de su padre. La propia princesa llegó a afirmar que temía por su vida en una grabación hecha en un baño y con un móvil que le enviaron sus amigos de forma clandestina.

“Continúa mejorando y tenemos la esperanza de que regrese a la vida pública en el momento apropiado”, dijo un comunicado de la familia real sobre Latifa, de 35 años y una de las 30 hijas (de seis madres) del emir Mohamed bin Rachid Al Maktoum, según recoge la propia BBC.

El comunicado llega después de que la ONU reclamase una prueba de vida de la princesa. “Hemos preguntado por su situación actual y pedido al Gobierno de Emiratos que responda de forma urgente”, ha dicho la portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Liz Throssell, que este viernes ha confirmado un contacto mantenido la víspera con la delegación emiratí en Ginebra.

Sin embargo, la nota de la familia real no incluye ninguna foto o vídeo de Latifa pese al requerimiento de la ONU para conocer la situación real de Latifa al Maktum.

La princesa intentó en un par de ocasiones escapar del control familiar, primero en 2002, con apenas 16 años, y, más recientemente, en 2018, cuando llegó a salir del país pero no encontró asilo.

Aislada y sin contacto con el exterior, logró grabar varios vídeos en los que insistía en que seguía recluida y a merced de su familia. Según estos documentos, la princesa estaba sola en una casa con las puertas y las ventanas cerradas y vigilada por las fuerzas de seguridad, sin acceso a médicos o abogados.