El mensaje de Fernando Simón a los de "voy a ver a mis primos": "Nos ayudan mucho"

El mensaje de Fernando Simón a los de "voy a ver a mis primos": "Nos ayudan mucho"

El epidemiólogo ha vuelto a alertar de los peligros del virus si la población se relaja.

Fernando Simón no renuncia a mostrarse “preocupado”. Por mucho que España “evolucione bien” en torno al coronavirus -este jueves se han superado los 250.000 casos- hay motivos que aún alertan al epidemiólogo, que ha vuelto a pedir sensatez y precaución a la población, especialmente tras los últimos brotes producidos por todo el país.

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias confiesa que algunos de esos focos “preocupan más por lo que significan”, aunque ha insistido en que prefiere no fijarse en cuántos hay, porque “el número cambia de un día para otro”.

“Nos preocupan dos brotes que se han producido a partir de desplazamientos desde otras comunidades” (sin precisar cuáles). “No tanto porque estén fuera de control ni nada parecido, pero implican un riesgo que nos hubiera gustado que no se produjera”.

Más en detalle ha precisado que “no alerta tanto que alguien con movilidad en España por sus condiciones laborales, habituales genere algún contagio, porque es fácil de vigilar”, pero sí lo hacen “los provocados por motivos de ocio, viajes familiares... porque son más difíciles de controlar”. Eso sí, no ha querido alarmar en exceso, pues “hasta ahora están bien delimitados y no han generado nada grave”.

Esos focos, “no sabemos cómo llamarlos al tener características mixtas: se iniciaron como familiares, pero alguno de los casos ha tenido contactos laborales, en una pequeña empresa o algo por el estilo”.

Preguntado al respecto, Simón ha explicado que son ejemplos que “indican que no es tan difícil que un brote familiar acabe siendo un brote comunitario”. “Estos casos nos ayudan a que la gente vea eso de que si yo voy a ver a mis primos se contagian como mucho mis primos. No, tus primos pueden contagiar a cualquiera”, ha rematado, pidiendo de nuevo prudencia.