El Govern asegura que no ha conseguido las respuestas que esperaba tras la reunión con Bolaños

El Govern asegura que no ha conseguido las respuestas que esperaba tras la reunión con Bolaños

La consellera de la Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, ha asegurado que "no podemos negociar con quien nos espía".

La consellera de la Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà.Lorena Sopena/Europa Press via Getty Images

La consellera de la Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, ha asegurado que sale insatisfecha de su reunión de este domingo con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, donde han abordado el presunto espionaje a líderes independentistas: “No tenemos las respuestas que esperábamos a la altura de la gravedad de los hechos”.

En rueda de prensa tras el encuentro que el Govern planteó en la Generalitat, Vilagrà ha dicho que las respuestas de Bolaños son “insuficientes, vagas, inconcretas y de resultados inciertos”, y ha concretado que una investigación interna del CNI no les da muchas garantías.

La consellera de ERC ha añadido que el Govern exige la dimisión de quienes sean los responsables, no solo por eso, sino también por su incapacidad de dar respuesta, y ha advertido de que así no se pueden tener relaciones fluidas con el Gobierno: “No podemos negociar con quien nos espía”.

Ha remarcado que el Ejecutivo de Pere Aragonès no quiere “una cabeza de turco ni excusas” y que únicamente le servirá una reacción que esté a la altura de la gravedad de los hechos: la dimisión de los responsables.

No ve garantías de saberlo todo

Para ella, esta solución aún está muy lejos de alcanzarse porque las medidas anunciadas por Bolaños no garantizan saber toda la información relativa al caso, ya que “siempre hay derecho de amparo en los secretos oficiales”.

Ha reclamado saber cuándo se sabrán los resultados de las investigaciones anunciadas, quién ordenó las presuntas escuchas, con qué objetivo, quién custodia ahora esta información y quién puede tener acceso: “No dudamos de que el Gobierno lo sabe”.

También ha dicho que durante la reunión, de más de dos horas, ha trasladado a Bolaños que este caso es un “escándalo mayúsculo” y que la situación requiere transparencia, ética y un marco jurídico distinto, que considera que no existen ahora.

El encuentro “no normaliza la situación”

También ha asegurado que la visita del ministro a la Generalitat “no sirve para normalizar la situación ni para garantizar el apoyo parlamentario”, porque las confianzas están rotas.

Ante este diagnóstico, ha exigido al Gobierno “valentía para enfrentarse a las profundidades de su propio Estado, con el riesgo de descubrir que no es un hecho aislado” y que este caso forma parte de lo que ha denominado causa general contra el independentismo.

“No hay duda de que el Estado español ha espiado a un mínimo de 65 personas por el hecho de ser independentistas”, y ha añadido que estos presuntos espionajes no pueden quedar impunes.