Gonzalo Caballero se sincera sobre su relación con Victoria Federica

Gonzalo Caballero se sincera sobre su relación con Victoria Federica

Ha concedido una entrevista exclusiva a '¡Hola!' tras pasar 25 días en el hospital por una grave cornada.

Gonzalo Caballero, en Las Ventas, el 12 de octubre antes de su grave cogida. Europa Press Entertainment via Getty Images

El torero Gonzalo Caballero sufrió una grave cornada el 12 de octubre en Las Ventas que lo mantuvo en el hospital durante 25 días. Ahora, ya recuperado, ha concedido una entrevista exclusiva a la revista ¡Hola! en la que habla de ese gran susto y de su relación con Victoria Federica, la sobrina del rey.

Ambos habían sido vistos juntos en varias ocasiones y se afirmaba que eran novios. El diestro ha confesado que así era, pero que rompieron. “He estado saliendo con Victoria unos meses, pero he tomado la decisión de no tener una relación seria porque quiero centrarme en mi profesión”, asegura en ¡Hola!.

A la hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar se la relaciona ahora con el DJ Jorge Bárcenas. En las últimas semanas han sido vistos paseando juntos y saliendo del gimnasio.

A pesar de no mantener ya una relación con ella, Gonzalo Caballero asegura que sigue siendo amigo de su hermano, Froilán: “Me han hecho muchísimo daño las polémicas que han salido, porque no son ciertas. Claro que Felipe es amigo mío, no hay ningún problema entre nosotros”.

Sobre su estancia en la UCI ha confesado lo que le pasó por la cabeza al darse cuenta de que estaba allí: “Cuando me despierto y me veo intubado, pienso: ‘¿Pero qué ha pasado?’ En ese momento recordaba la sensación de asumir que iba a morir y pienso: ’Bueno, por lo menos estoy vivo”.

Gonzalo Caballero resultó herido al entrar a matar al segundo toro de la corrida celebrada en Las Ventas con motivo del Día de la Fiesta Nacional.

En la enfermería fue intervenido de una “cornada en tercio proximal, cara interna del muslo izquierdo con dos trayectorias: una de 30 centímetros hacia arriba y hacia fuera que produce destrozos en músculos sartorios y cuádriceps, además de contusionar la pala ilíaca izquierda; y otro trayecto de 25 centímetros hacia atrás que secciona vena femoral y ramas colaterales, de pronóstico muy grave”.

A su llegada al hospital tuvo que ser intervenido nuevamente durante tres horas para reparar las lesiones vasculares que produjo la cornada, la más severa, la de la vena femoral, totalmente seccionada y por la que perdió tres litros de sangre.