Hamburguesas y patatas gratis para que los neoyorquinos se vacunen

Hamburguesas y patatas gratis para que los neoyorquinos se vacunen

Estados Unidos tiene la ardua tarea de convencer a los indecisos en una carrera contrarreloj hasta el 4 de julio.

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.Noam Galai / Getty Images

A los donuts, marihuana y cerveza gratis en Estados Unidos para incentivar la vacunación se unen ahora las hamburguesas y patatas. La ciudad de Nueva York y la popular cadena Shake Shack han anunciado este jueves que ofrecerán de forma gratuita esta comida rápida para animar a los ciudadanos a inmunizarse contra el coronavirus.

El alcalde de la Gran Manzana, Bill de Blasio, presentó la promoción comiéndose una ración en plena conferencia de prensa y a una hora más propicia para el desayuno, en una imagen que no tardó en circular en los medios locales y las redes sociales.

“Mmm, vacunación”, declaraba De Blasio tras dar un bocado a una hamburguesa en un peculiar intento de tentar a los neoyorquinos a acercarse a uno de los puntos instalados en toda la ciudad para administrar las dosis del suero.

“Hay mucha gente que está lista para vacunarse, simplemente no lo han hecho. Necesitan un pequeño incentivo adicional”, señaló el alcalde, que en los últimos días ha anunciado varias estrategias para facilitar a todos los ciudadanos, neoyorquinos y de fuera, que se pongan la vacuna.

Dentro de esos esfuerzos, Shake Shack, nacida en Nueva York, ofrecerá durante los próximos días un vale para una hamburguesa a quienes se vacunen en una de los puntos móviles repartidos por la ciudad.

Para quienes ya hayan recibido el pinchazo, la cadena de restaurantes ofrece patatas fritas gratis junto a la compra de un sándwich con solo presentar la tarjeta de vacunación.

Los incentivos de todo tipo para animar a los ciudadanos a vacunarse se han generalizado en las últimas semanas en Estados Unidos, a medida que ha descendido el ritmo de vacunación, no por falta de dosis, sino por falta de brazos donde administrarlas.

El país tiene la ardua tarea de convencer a los indecisos en una carrera contrarreloj hasta el 4 de julio, Día de la Independencia “del virus”, en palabras del presidente Joe Biden, cuando la meta impuesta es que el 70% de los adultos hayan recibido al menos una dosis y que estén inmunizadas unas 160 millones de personas.