Juras, promesas y traspasos de carteras: el nuevo Gobierno de Sánchez cristaliza este lunes

Juras, promesas y traspasos de carteras: el nuevo Gobierno de Sánchez cristaliza este lunes

Los siete nuevos rostros socialistas en el Gabinete toman posesión de sus cargos ante el rey, con la meta de "recuperar" el país tras lo peor de la crisis del coronavirus.

Siete rostros nuevos y nueve traspasos de carteras. La mañana de este lunes, 12 de julio, tiene unos claros protagonistas: los nuevos ministros que entran a formar parte del gabinete que capitanea Pedro Sánchez. La remodelación del equipo, que sólo ha afectado a los socialistas y no a sus socios de Unidas Podemos, fue anunciada el sábado y ahora cristalizará con el protocolo y los primeros discursos oficiales. El paso de página estará hecho antes del mediodía.

A partir de las nueve de la mañana, los nuevos ministros del Gobierno de coalición jurarán o prometerán sus cargos ante el rey Felipe VI, en un acto que se hará, como es costumbre, en el Palacio de la Zarzuela, según ha informado la Casa del Rey. Habrá que ver si alguno de ellos elige fórmulas nuevas para dar este paso, como las feminizadas de UP en enero de 2020. Luego, posado y foto de familia de rigor.

Tras este paso formal, cada uno de los nuevos elegidos por Sánchez tendrán que acudir a sus respectivos nuevos ministerios, donde posarán nuevamente recibiendo las carteras de sus predecesores. Las agendas difundidas por los distintos departamentos informan de que la mayoría de estos actos están programados para las 10 y media de la mañana. Contando el previsible retraso, los saludos con los ministros salientes y las comparecencias ante la prensa, España tendrá nuevo Ejecutivo hacia las 12 de la mañana.

Ya el martes, habrá reunión ordinaria del Consejo de Ministros, con nuevos nombres y nuevos rostros. No habrá retrasos en su cita semanal pese a la avalancha de novedades, porque lo anunciado el sábado por Sánchez es un verdadero terremoto político, que no sólo afecta a un número importante de materias sino que toca de lleno a su núcleo duro, en La Moncloa y hasta en el PSOE. Todo, en busca de una “recuperación” que se hace urgente, tras la pandemia del coronavirus y sus consecuencias.

Para consolidar una “renovación generacional” que sirva para “impulsar la recuperación económica tras la pandemia”, Sánchez ha bajado la media de edad del Ejecutivo, que sumando a los ministros de Unidas Podemos (que no se han tocado en esta crisis) pasa de 55 a 50 años, y además se refuerza en la presencia de mujeres, que antes representaban un 54% y hoy un 63%. Un “rejuvenecimiento muy importante” que permitirá lanzar “la agenda de cambios” que Sánchez anunció en su investidura y que, asume, se ha visto afectada de manera notable por los efectos del covid-19.

  El nuevo Consejo de Ministros de Pedro Sánchez. EFE

Los cambios

Sánchez, ha abordado la más amplia remodelación de su gabinete desde que llegó al poder, que supondrá la salida de siete de los 23 miembros del Ejecutivo y un cambio interno de cartera.

En esta remodelación, que no afecta a los cinco ministros designados por Podemos en el Gobierno de coalición, destaca la salida de Carmen Calvo, hasta ahora número dos, y del secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Con la marcha de Calvo, asciende a vicepresidenta primera, la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño.

José Manuel Albares será el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, en sustitución de Arancha González Laya.

La nueva ministra de Justicia será Pilar Llop, en tanto que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, asume también las tareas de Función Pública pero deja la Portavocía en favor de Isabel Rodríguez, que asume también el Ministerio de Política Territorial. Hasta este domingo era alcaldesa de Puertollano (Ciudad Real). Lo mismo que Raquel Sánchez Jiménez, regidora de Gavá (Barcelona), que será la nueva ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en tanto que Pilar Alegría, relevará a Isabel Celaá, en Educación y FP.

Miquel Iceta, hasta ahora en Política Territorial y Función Pública, pasa a Cultura y Deporte, mientras que Pedro Duque deja Ciencia e Innovación, en favor de Diana Morant, actual alcaldesa de Gandía.

Muscular al PSOE para frenar a Casado

La honda remodelación que Sánchez ha acometido en el ala socialista de su Gobierno, sustituyendo a su núcleo duro por perfiles renovados y de partido, busca unir al PSOE ante la segunda etapa de la legislatura, que se anticipa dura y que arranca con el líder de la oposición, Pablo Casado, a la cabeza en los sondeos.

En el PSOE, informa la Agencia EFE, interpretan que la salida de figuras clave como Calvo, Ábalos e Iván Redondo adelanta una transformación intensa de la cúpula del partido, que incluirá la marcha de Ábalos como secretario de Organización. Los cambios acometidos por Sánchez dejan varias lecturas entre los suyos: la profundidad de la renovación demuestra que “no se casa con nadie”, apuesta por perfiles “de refresco” para reactivar el partido y mejorar sus expectativas electorales o hace guiños a Ferraz al prescindir de Redondo y apostar por “hombres de partido”.

En el PSOE consideran que los movimientos en el Ejecutivo dan pista de las intenciones del presidente en clave de partido de cara al 40º congreso que se celebrará del 15 al 17 de octubre en Valencia.

Fuentes socialistas ven el mensaje de una renovación de calado y se espera que esta semana Ábalos despeje la incógnita sobre su adiós; podría ser inmediato o optar en cambio por esperar a ser relevado en el congreso. Un miembro de la dirección del PSOE aventura además que en Valencia van a pasar a un segundo plano destacados dirigentes sanchistas y afirma a Efe que “Pedro ha demostrado que no se casa con nadie”.

Otras fuentes apuntan a que el objetivo de Sánchez es acabar con disputas internas: “Unir al partido como una piña ante una segunda parte de la legislatura en la que la oposición va a seguir siendo muy dura”.

En esa meta enmarcan nombramientos como los de Óscar López al frente del Gabinete de la Presidencia y los de las ministras Isabel Rodríguez y Pilar Alegría, con especial relevancia ante el proceso de congresos de cada federación que habrá hasta fin de año una vez que se celebre el cónclave de Valencia.

En esos perfiles “de refresco” también despiertan atención los relevos recientes en delegaciones del Gobierno como las de Madrid (Mercedes González), Galicia (José Miñones) y Andalucía (Pedro Fernández).

Y son los nombres de Óscar López, y de Félix Bolaños, ascendido a ministro de Presidencia, los que se citan al hablar de “hombres de partido” con los que Sánchez hace gestos para mejorar sus relaciones con Ferraz, que nunca han sido las deseadas.

De fondo, sobresale la necesidad de reactivar al PSOE, que tras las elecciones de la Comunidad de Madrid, donde fue adelantado por Más Madrid, y después de aprobar los indultos ha retrocedido en las encuestas, que, a excepción de la del CIS, sientan a Pablo Casado en La Moncloa. Y así se lo ha recordado el líder de la oposición a Sánchez desde Ermua, donde ha clausurado la Escuela de Verano Miguel Ángel Blanco, con la que Nuevas Generaciones homenajea al edil asesinado por ETA hace 24 años.

“Cuando cambias a siete ministros, a tu núcleo duro, a quienes te hicieron presidente, eso lo hace quien sabe que va muy mal”, ha afirmado Casado, que ha calificado la remodelación gubernamental de “carnicería en el PSOE”.

Casado, que ve “muy verde” al nuevo Consejo de Ministros, ha reprochado además que, al no tocar a los ministros de Unidas Podemos, Sánchez mantenga “a toda la radicalidad” y ha argumentado que quienes mandan en el Gobierno “siguen fuera”. “Hemos cambiado las marionetas pero mantenemos al que las mueve, que es Rufián, es Torra, que es Aragonés y que es Bildu”, ha denunciado.

También Ciudadanos piensa que a Sánchez “no le va a salir bien” la remodelación del Gobierno porque “no nos va a engañar” y “a nadie se nos van a olvidar los indultos”, según ha afirmado el vicecretario general de Cs, Edmundo Bal.

“Lo importante no es el quién, sino el qué”, ha señalado por su parte el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en alusión a “resolución del conflicto político con Cataluña, de inversiones, de relaciones habituales entre los dos gobiernos y de lucha contra la covid”.

La Generalitat espera, por su parte, que la comisión bilateral de julio “pueda avanzar” y que el Gobierno lleve una propuesta para la resolución del conflicto político a la mesa de diálogo que se reunirá en septiembre. El líder del PSC en el Parlament, Salvador Illa, ha garantizado este domingo que, pese a que Miquel Iceta pase de ministro de Política Territorial a titular de Cultura, “personas del PSC estarán presentes y tendrán mucho que decir en el proceso de diálogo”.

Los ministros del actual equipo se han mantenido este domingo en un segundo plano, a excepción de la de Hacienda, María Jesús Montero, que ha acudido a Algeciras (Cádiz) para mostrar sus condolencias por el agente de aduanas fallecido en servicio, y por respeto a la familia, su equipo ha pedido evitar preguntas sobre la crisis del Gobierno.