Entrar en el Olimpo no es fácil: qué tiene que pasar para que un deporte sea olímpico

Entrar en el Olimpo no es fácil: qué tiene que pasar para que un deporte sea olímpico

Hay decenas de disciplinas, con sus federaciones detrás, que aspiran a formar parte de ese gran escaparate mundial.

Anillos olímpicos situados en Tokio.Yuichi Yamazaki via Getty Images

Es el ‘Olimpo’ del deporte y nadie escapa de su poder. Miles de deportistas sueñan a diario con coronarse en los Juegos Olímpicos, pero no son los únicos a los que les quita el sueño. Sin hacer tanto ruido, en cada cita hay decenas de disciplinas, con sus federaciones detrás, que aspiran a formar parte de ese gran escaparate mundial. Pero entrar en el club de los ‘olímpicos’ no es nada fácil.

Para decidir los que entran en este particular ‘valhalla’, el Comité Olímpico Internacional (COI) cuenta con una serie de condiciones o características —recogidas en la Carta Olímpica— que una actividad debe reunir si quiere formar parte de la competición internacional.

Juan Manuel Surroca, periodista especializado en temas olímpicos y miembro del Centro de Estudios Olímpicos de Barcelona, afirma, en declaraciones a El HuffPost, que los JJOO son “el escaparate más universal del deporte mundial”.

Por este motivo, cualquier deporte querría entrar en el ‘club’ y cada año más disciplinas se postulan como candidatas. Entre ellas, nuevas modalidades que buscan acercar al público joven. “El COI sabe que viene una generación totalmente distinta a la anterior y que tiene que ir adaptando el programa deportivo a los gustos de la gente de ahora”, añade.

Sin embargo, cumplir con los requisitos no asegura su inclusión en la lista de los elegidos, ya que únicamente 35 deportes pueden entrar a formar parte del campeonato. Pero el catálogo deportivo suele ser más amplio, ya que dentro de una actividad existen distintas disciplinas. Así, el total de categorías para los JJOO de Tokio 2021 son 50.

El COI sabe que viene una generación totalmente distinta a la anterior y que tiene que ir adaptando el programa deportivo a los gustos de la gente de ahora
Juan Manuel Surroca, periodista especializado en temas olímpicos y miembro del Centro de Estudios Olímpicos de Barcelona

La primera de las exigencias es que cumpla con las normas de la Carta Olímpica y con el Código Mundial Antidopaje. Además, todas las actividades deben estar regidas por las Federaciones Deportivas Internacionales (FI) que se encuentran en el programa deportivo.

Por otra parte, el deporte electo debe ser ampliamente practicado. En el caso de los juegos de verano, las actividades deben practicarse en 75 países y 4 continentes por hombres y en un mínimo de 40 países y 3 continentes por mujeres. Respecto a los JJOO de Invierno, tiene que estar presente en 25 países y 3 continentes, sin diferenciar entre hombres y mujeres.

En el caso de que se cumplan estas exigencias, el COI valorará los deportes candidatos a entrar en los Juegos Olímpicos. Por último, será sometido a votación durante una sesión del comité para aceptar su entrada en el programa. Además de las condiciones de la entidad internacional, el país organizador puede proponer que se incluyan o eliminen categorías en función de su fortaleza en la misma o de las condiciones climáticas o económicas.

La lista de deportes preseleccionados para la competición olímpica fueron 26, aunque solo cinco consiguieron el visto bueno. Así, los deportes afortunados que han conseguido colarse en el campeonato de Tokio son karate, escalada deportiva, surf, skateboarding y béisbol/sóftbol. Estos se suman a la lista de deportes que ya había en Río 2016.

Almudena Muñoz, directora de comunicación de la Real Federación Española de Karate (RFEK) y exmiembro del equipo nacional, celebra la entrada de este deporte en los JJOO de este verano.

Tu techo ya no está en ser el mejor del mundo, sino en ser un campeón olímpico
Almudena Muñoz, directora de comunicación de la RFEK y exmiembro del equipo nacional

Muñoz considera que es muy beneficioso formar parte del programa olímpico para promocionar el karate, ya que puede generar “interés mediático” y dar visibilidad. Además, para los deportistas, según detalla, es una oportunidad porque les pone en el foco de los patrocinadores y de cara a recibir becas.

A nivel deportivo, destaca que genera expectativa de competición. “Tu techo ya no está en ser el mejor del mundo, sino en ser un campeón olímpico y esto es un plus para animar a la gente a que practique este deporte”.

El problema es que nadie quiere salir ni desaparecer del programa olímpico
Paloma del Río

Paloma del Río, periodista de TVE, explica que el comité ha dado un paso al frente para reactivar el programa olímpico. Así, en el año 2010, el COI creó los Youth Olympic Games (YOG). En esta plataforma, la organización “va lanzando deportes que practican los jóvenes para ver el resultado que tienen de cara a las audiencias televisivas”.

Este proyecto ha surgido, según asegura Del Río, para llamar la atención de los jóvenes. Sin embargo, “el problema es que nadie quiere salir ni desaparecer del programa olímpico y para no echar a nadie rebajan o agrupan las categorías de algunas actividades como en boxeo o halterofilia”.

Otros deportes que han intentado ser olímpicos

Otro caso es el del ajedrez, que a estas alturas ya nadie lo considera un simple juego de mesa: requiere de estrategia, gran concentración y visión sobre el tablero. Así, el COI le brinda el reconocimiento que merece y lo califica como un deporte desde el año 2000.

Además, la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) está reconocida por el Comité como el máximo organismo en el mundo del ajedrez. Sin embargo, nunca ha conseguido entrar en la lista de deportes de unos Juegos Olímpicos, aunque no deja de intentarlo, ya que llevan postulándose desde el año 2004. Tokio 2021 y Paris 2024 tampoco contarán con esta actividad en su calendario deportivo.

Otros deportes que se han quedado a las puertas de la gloria y que finalmente han sido rechazados son billar, bolos, bridge (un juego de naipes), floorball, disco volador, korfball, netball, polo, raquetbol, squash o sumo.

Por otra parte, los deportes que han formado parte de los JJOO no tienen asegurada su permanencia en las competiciones futuras. Una medida que han sufrido en sus propias carnes muchas disciplinas como el golf, el rugby el futbol americano, el críquet, la pelota vasca o el lacrosse.

El kárate, que estará presente en Tokio 2021, no formará parte de París 2024, un “mazazo” que no comprenden desde la RFEK. “Es una faena, hemos peleado por no salir, pero el comité de París ha decidido dejarnos fuera, aunque lo seguiremos intentando”, afirma Almudena Muñoz.

Además, cree que en Tokio —cuna del karate— se van a “volcar mucho en que el karate sea uno de los deportes estrella de estos JJOO y estoy segura de que lo será”. Se trata de un arte marcial que, según comenta, tiene 100 millones de practicantes. Por este motivo, considera que podrían “arrepentirse” en París de haber decidido dejar fuera el kárate.

eSports

Los eSports son otro sector que aspira a formar parte de la competición de los cinco anillos. En los últimos años, han ido ganando peso en la sociedad hasta hacerse un hueco entre las competiciones más importantes del mundo con millones de fans. Tanto los ingresos y patrocinadores como la audiencia no han dejado de crecer y esto ha provocado que el rumor de que dicha industria debería entrar a formar parte de los JJOO haya ido aumentan hasta situarse en el radar del COI.

La Asociación Española de Videojuegos (AEVI) relata que los eSports son una categoría genérica que se refiere a competiciones de videojuegos de géneros distintos, que exigen habilidades distintas y con formas de competición distintas.

Así, este sector tiene ciertas áreas comunes con el deporte, como su nivel de penetración social o su espíritu de competición y espectáculo, “si bien son realidades totalmente diferentes en la práctica y organización”. Las bases del deporte son asociativas y territoriales, mientras que la industria de los eSports es económica (todos los actores son empresas) y global, al estar basada en internet, indicen desde la asociación.

A pesar de que no han entrado en la lista de deportes, han conseguido un espacio en la cita olímpica. Así, el pasado 13 de mayo comenzó la Serie Olímpica Virtual (OVS) que ha servido de antesala a la celebración de la competición internacional.

Desde el organismo consideran que la presencia de los videojuegos en el contexto de un nuevo evento del Comité Olímpico Internacional es una buena oportunidad para los títulos involucrados y para la industria de los videojuegos. Sin embargo, “no es indicativo de que los videojuegos deban considerarse deporte”, matizan.

Yo entiendo los JJOO como una competición sobre tu esfuerzo y los eSports no tienen nada que ver
Paloma del Río, periodista de TVE

Sobre esta industria, Surroca opina que son una actividad con “mucho impacto social” y desde el comité tratan de darles visibilidad porque “saben que son muy importantes”.

Por el contrario, Del Río afirma que no tiene sentido. “Yo entiendo los JJOO como una competición sobre tu esfuerzo. Al final, los eSports creo que no tienen nada que ver con lo que es la esencia de los Juegos Olímpicos, que es la competición, el sudor, el tiempo, la altura. Esta periodista recuerda el lema “famoso” del campeonato: más alto, más lejos y mas fuerte. “Y en los eSport eso no se da”, sentencia.