La prensa belga revela que la sede de la UE fue construida por emigrantes sin papeles
Los trabajadores sostienen que la subcontrata que hizo el 'Space Egg' de Bruselas llegó a no pagar siquiera a los albañiles
La Unión Europea (UE) afronta una acusación bastante vergonzosa: la de que su flamante sede central en Bruselas ha sido levantada por trabajadores inmigrantes sin papeles. Según ha publicado el diario local De Standaar, el Space Egg, como se le conoce, contó con mano de obra a la que, en ocasiones, ni se le pagó.
El edificio del Consejo Europeo en Bruselas es un bloque compuesto con ventanas llegadas de toda la UE que, en el centro, contiene una estructura de vidrio ovoide. Se inauguró en 2016 y costó más de 350 millones de euros. Ahora se explica que el subcontratista, Group Diamond Services, que se declaró en quiebra en 2015, fue investigado por diversas reclamaciones de trabajadores búlgaros, que no tuvieron ni sueldo, informa el periódico.
La investigación se archivó en octubre debido a la evidencia insuficiente, pero De Standaard ha descubierto que, en realidad, los fiscales habían perdido los archivos del caso en algún momento de los últimos cuatro años.
Este medio apuntala su denuncia con testimonios de algunos de los trabajadores, como Beyhan Dzhelilov, de 43 años, que era el jefe de uno de los equipos en la edificación de la mole. “Varios miembros no tenían documentos de residencia belgas. Ninguno de nosotros obtuvo un contrato, no estábamos asegurados”, sostiene.
Las principales compañías implicadas, Interbuild y Jan De Nul, que ganaron la licitación para la construcción del edificio Europa, dijeron a De Standaard que no tenían conocimiento de ninguna explotación de trabajadores por parte de sus subcontratistas. Un portavoz de Jan De Nul ha declarado que GDS fue retirado del proyecto en una fase inicial, ya que “no cumplió con la planificación contractual y técnicamente no realizó el trabajo correctamente”.
Como cita The Guardian, aún no hay reacción a esta información por parte de las autoridades europeas. En principio, el estado belga era el principal contratista del edificio Europa y tampoco por ese lado hay aún respuesta.
La alemana Ursula von der Leyen y el luxemburgués Jean-Claude Juncker, nueva presidenta de la CE y presidente saliente.
El belga Charles Michel y el polaco Donald Tusk, el que entra y el que sale del Consejo Europeo.
La francesa Christine Lagarde y el italiano Mario Draghi: ella llega y él se va del Banco Central Europeo.
