La segunda ola del coronavirus congela el mito de los países nórdicos

La segunda ola del coronavirus congela el mito de los países nórdicos

Ejemplo mundial por su control del covid hace unos meses, naciones como Suecia recurren ahora a medidas más duras para frenar el avance del virus.

Mujeres con mascarilla, el 20 de noviembre de 2020, en las calles de Estocolmo.FREDRIK SANDBERG via Getty Images

La mayor parte de Europa presenta una curva descendente en cuando a nuevos positivos de coronavirus, con un total de 17,5 millones de los 60 millones a nivel mundial. Está costando -mucho, muchísimo- pero se está logrando que la segunda ola vaya a menos. Sin embargo, en los países nórdicos, los que mejor resistieron el inicio de la pandemia, los que tomaron medidas más laxas y más confiaron en el civismo y el autocontrol, se ven ahora golpeados con fuerza, y sin necesidad de fiestas navideñas.

Referentes como el sueco empiezan a no serlo tanto y toca aplicar medidas duras. Este país, informa EFE, llegará a su pico de contagios a las puertas de la Navidad. Aunque el aumento de positivos ha perdido fuerza, se considera que hay un gran riesgo de saturación de la sanidad. Por ahora se han registrado 236.000 casos, con 6.622 muertos.

  Datos de coronavirus en Suecia.GOOGLE

El pasado domingo, el primer ministro, Stefan Löfven -quien ha tenido que estar en cuarentena por infecciones cercanas- lanzó un sombrío mensaje a sus ciudadanos: “Suecia está a prueba, pero Suecia se mantendrá firme (...). Juntos. Por Suecia”. No se había escuchado algo así desde que se conoció el SARS-CoV-2 pero es que “la situación empeora rápidamente”, reconoce en su cuenta de Facebook.

El país, que hará test rápidos de antígenos en lugares como asilos, presenta la incidencia más alta entre los países nórdicos en 14 días (617 casos por cada 100.000 habitantes), por lo que ha dejado a un lado la política suave de un principio y ahora limita las reuniones públicas, prohíbe la venta de alcohol desde las 22:00 horas y cierra media hora después la hostelería y los clubes nocturnos. El uso de la mascarilla sigue sin ser obligatorio.

Tampoco es un confinamiento férreo, ni obliga a burbujas minúsculas, porque su base sigue siendo intentar controlar a través de las recomendaciones sanitarias la expansión de la pandemia. Su filosofía es que “si apelas al sentido común de la ciudadanía en lugar de obligarla a aceptar restricciones, la aceptación a largo plazo será mayor”, como señala el Gobierno en uno de sus folletos.

El epidemiólogo Anders Tegnell, una referencia mundial, comanda la lucha contra la pandemia y la confianza en él y su estrategia ciudadana es altísima, dicen las encuestas. El problema, explica a la CNN, es que ha habido relajación y, pasados estos meses, el nivel de cumplimiento es más bajo.

Suecia ocupa el puesto 16º en la lista de los países con mejores resultados en la lucha contra el Covid, elaborado por la agencia Bloomberg.

No queda sino ceder

Las miradas se dirigen a Suecia porque fue el más firme en su estrategia de no poner controles y por la actual subida, pero en menor medida, es lo mismo que ocurre en los demás países nórdicos: primavera más llevadera y otoño-invierno preocupante. No queda sino ceder a las restricciones, pese a que Finlandia, Noruega y Dinamarca, que siguen ocupando los puestos 5º, 6º y 10º de esa lista de Bloomberg, reflejan que las cosas se han hecho bien. Y, sin embargo, también se ven forzadas a apretar.

El pasado 20 de noviembre, las autoridades del área metropolitana de Helsinki anunciaron nuevas medidas para contener la propagación del Covid-19, después de que Finlandia registrase 461 nuevos contagios en un día, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia.

Las medidas, que durarán tres semanas al menos, incluyen la suspensión de todos los deportes de equipo en el interior de las instalaciones municipales para aficionados mayores de 20 años y la limitación de público a un máximo de 20 personas en todos los eventos que no se celebren al aire libre. Se limita a la mitad el número de visitantes a las piscinas municipales, se reduce la cantidad de plazas de estudio disponibles en las bibliotecas y se recomienda que las reuniones privadas no superen un máximo de 10 personas. En lo referente a la educación, se ha aumentado la proporción de cursos a distancia en Secundaria y se recomienda el uso de mascarillas a los estudiantes de la última fase de primaria (entre los 13 y 15 años).

Ha habido 23.766 infectados en el país, con 384 fallecidos.

  Datos de coronavirus en Finlandia.GOOGLE

En Noruega, con 33.988 casos y 316 muertos, el Gobierno ha instado a reducir el contacto social al “mínimo indispensable”. Ha tenido que dar pasos impensables hace tres meses, como la suspensión de competiciones deportivas como el europeo de balonmano. Desde hace tres semanas, los bares tienen que cerrar a la medianoche y las reuniones privadas en lugares públicos se limitan a 20 personas. Los eventos en lugares cerrados sin asientos asignados admiten a 50, como máximo, y 200 si están asignados.

El Ejecutivo noruego ha pedido a los ciudadanos quedarse en casa el máximo tiempo posible y limitar el contacto social con otras personas ante el “desarrollo aterrador” de la enfermedad, tras los meses de bonanza.

  Datos de coronavirus en Noruega.GOOGLE

Y en Dinamarca, 74.722 infectados y 802 fallecidos, han tenido hasta que sacrificar a todos sus visones por una mutación del coronavirus que podía afectar a la eficacia de las vacunas, se acaban de suavizar las restricciones en los siete municipios de Jutlandia del norte (desplazamientos, cierre de los transportes públicos, bares y restaurantes), previstas hasta el 3 de diciembre. Ya se están abriendo todas las instituciones culturales y deportivas, restaurantes, bares, escuelas e institutos; se reanudará el transporte colectivo y ya no regirá la recomendación a los habitantes de esas localidades de no desplazarse a otras partes del país, indica AFP.

  Datos de coronavirus en Dinamarca.GOOGLE

Medidas que ayudan

Finlandia y Noruega siguen un protocolo similar, con estrictos controles de ingreso y salida del país, aislamiento obligatorio para los viajeros, y exhaustivos rastreos de las cadenas de contagios, para evitar los “eventos de supercontagio” cuando ya hay un caso confirmado. A los viajeros que ingresan a Noruega se les exige un certificado de testeo negativo y deben hacer cuarentena en aislamiento durante 10 días en un hotel autorizado. Quienes violan el confinamiento exponen a cuantiosas multas o la inmediata deportación.

En el plano sanitario, ambas naciones están siendo capaces de rastrear el origen de la mayoría de los nuevos contagios, porque hay medios disponibles. Tan sencillo como eso.

Y ese enfoque les ha reportado beneficios económicos. Está previsto que los PBI de Noruega y Finlandia caigan este año un 2,8% y un 4% respectivamente, frente a caídas previstas del 12,8% en España y del 9,8% en Francia y Gran Bretaña, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).