La UE investiga a Instagram por el manejo de datos de niños

La UE investiga a Instagram por el manejo de datos de niños

Al pasar las cuentas a comerciales, los usuarios se ven obligados a mostrar sus números de teléfono y direcciones de correo electrónico públicamente.

Group of friends on their mobile phones shot form above in the fading lightJustin Lambert via Getty Images

Instagram está siendo investigado por el Comisionado de Protección de Datos de Irlanda (DPC) por su manejo de los datos personales de los niños en esta red social. El propietario de la aplicación de redes sociales, Facebook, podría enfrentarse a una gran multa si se descubre que infringe las leyes de privacidad, informa la BBC.

Las investigaciones de esta red surgen de las quejas de que Instagram hizo que la información de contacto de las cuentas comerciales fuera públicamente visible para cualquiera que acceda a la aplicación.

Varios gigantes tecnológicos de EEUU tienen su sede europea en Irlanda, y el DPC es el principal regulador de la Unión Europea, según el Reglamento General de Protección de Datos de la UE (GDPR), que entró en vigor en 2018. El DPC es responsable, pues, de proteger el derecho de las personas a la privacidad en línea y tiene el poder de imponer multas importantes, en toda la Unión.

El regulador irlandés está investigando si Facebook tiene una base legal para procesar datos personales de niños y si emplea protecciones y restricciones adecuadas en Instagram para niños. Por separado, también está analizando si Facebook se ha adherido a los requisitos del RGPD en relación con el perfil de Instagram y la configuración de la cuenta. Está investigando si Facebook protege adecuadamente los derechos de protección de datos de los niños, como personas vulnerables que son.

La edad mínima para tener una cuenta de Instagram es de 13 años. “Instagram es una plataforma de redes sociales que es ampliamente utilizada por niños en Irlanda y en toda Europa”, reconoce Graham Doyle, subcomisionado de DPC. “La DPC ha estado monitoreando activamente las quejas recibidas de personas en este campo y ha identificado posibles preocupaciones en relación con el procesamiento de los datos personales de los niños en Instagram, que requieren un examen más detenido”, abunda.

Uso frecuente

En febrero de 2019, el científico de datos David Stier analizó los perfiles de casi 200.000 usuarios de Instagram en todo el mundo, y de sus conclusiones se extrae que durante más de un año, al menos 60 millones de usuarios menores de 18 años tuvieron la opción de cambiar fácilmente sus perfiles a cuentas comerciales.

Las cuentas comerciales de Instagram requieren que los usuarios muestren sus números de teléfono y direcciones de correo electrónico públicamente, lo que significa que los datos personales que pertenecen a muchos usuarios son visibles para otros miembros de Instagram.

A Stier le preocupa que personas completamente extrañas, ajenas a esos menores, puedan contactar a los niños usando sus correos electrónicos y números de teléfono móvil en Instagram. La misma información personal también estaba contenida en el código fuente HTML de las páginas web a las que se accede al usar Instagram en una computadora, lo que significa que los piratas informáticos podrían “atraparla”.

Stier informó de sus hallazgos a Facebook, pero escribió en un blog de Medium que Instagram se había negado a ocultar las direcciones de correo electrónico y los números de teléfono de las cuentas comerciales. Sin embargo, Facebook decidió eliminar la información de contacto del código fuente de las páginas de Instagram.

A pesar de esto, el experto citado por la BBC cree que los piratas informáticos podrían haber tenido éxito al robar la información personal del sitio web de Instagram, después de que se revelara en mayo de 2019 que los datos de contacto relacionados con 49 millones de usuarios estaban almacenados en línea en una base de datos no protegida propiedad, de una empresa de India.

″¿Tenemos la responsabilidad de mantener ocultos los números de teléfono y los correos electrónicos de los niños para que los extraños no puedan encontrarlos con solo hacer clic en un botón?”, escribe Stier. “Hablando como padre, quiero estar seguro de que la experiencia que Instagram ofrece a los adolescentes es lo más supervisada por adultos posible”.