La última y ridícula agenda de Trump en la Casa Blanca

La última y ridícula agenda de Trump en la Casa Blanca

"Trabajará desde temprano hasta tarde. Hará muchas llamadas y tendrá muchas reuniones".

Donald Trump, paseando por la Casa Blanca el 25 de enero de 2019. ASSOCIATED PRESS

Donald Trump está viviendo su último día en la Casa Blanca. Mañana dejará de ser presidente de EEUU y se irá a vivir a Florida, a rezar por que los procesos judiciales que tiene pendientes se resuelvan sin pena. Pero hoy, aún, trabaja en el Despacho Oval. ¿Y qué tiene en su agenda en un día así? Pues concretamente no lo sabemos, pero según el aviso de prensa hecho por la Casa Blanca, el republicano “trabajará desde temprano hasta tarde. Hará muchas llamadas y tendrá muchas reuniones”. Suena a Rajoy.

Es lo que han informado sus asesores en los últimos días, siempre el mismo mensaje. Con quién habla y para qué es una incógnita. Las especulaciones van desde que prepara un indulto masivo a sus amigos y para él mismo, hasta que se irá con alguna nueva polémica decisión o ataque sobre Irán. Lo de que vaya a activar el botón nuclear es un chiste recurrente que, esperamos, quede en chiste.

El mandatario apura sus últimos día en el poder encerrado en la Casa Blanca, abandonado por la mayoría de sus aliados, alejado de los focos y de las cámaras que tanto le gustan, enmudecido en redes sociales y bajo la sombra de un segundo impeachment o juicio político.

Poco ha trascendido de sus actividades y conversaciones en estos días. Su familia prepara ya la mudanza, y buena parte del personal habitual de la residencia presidencial ya se ha marchado. Se sabe que el presidente no asistirá a la ceremonia de inauguración del mandato de su sucesor, Joe Biden, y ni siquiera estará en Washington: el mismo día 20 por la mañana se marchará a su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, después de una despedida militar en la que ha sido su casa en Washington durante cuatro años.

Según medios como CNN o Politico, Trump no ha tenido ningún contacto con Biden para preparar la transición y se ha negado a dejarle siquiera una carta o mensaje de despedida, como hizo con él Barack Obama.

La primera dama, Melania Trump, sí se ha despedido. Este lunes ha difundido un vídeo en el que insta a los estadounidenses a “escoger el amor sobre el odio” y “la paz sobre la violencia”. “Pienso en toda la gente que me llevo en el corazón con sus increíbles historias de amor, patriotismo y devoción”, ha asegurado.