Los primeros compradores de Uniqlo en Madrid se están forrando con la reventa de esta camiseta

Centenares de personas hacían cola este jueves antes de las 10 de la mañana en el barrio de Salamanca, en Madrid. A pesar de la lluvia que caía a esas horas en la capital, muchos de ellos se refugiaban bajo sus paraguas en una ordenada fila para entrar en el número 6 de la calle Goya. Uniqlo estaba a punto de abrir las puertas de su primer establecimiento en la capital.

“Llegué sobre las 9:30 y la cola ya daba la vuelta a la esquina. Había gente de todo tipo en la cola, los primeros llevaban sillas de camping. Detrás de mí una turista argentina que pasaba por allí, pero, por las conversaciones, la mayoría se sabía a lo que venían”, cuenta Adrián Torres, un joven de 29 años, que trabaja en marketing de Meristation.

“Nada más abrir las puertas fue una locura”, relata Adrián. El tesoro escondido con el que todos querían hacerse se hallaba en la planta inferior de la tienda (-1), en una estantería situada nada más bajar por la escalera mecánica más lejana a la puerta. “La planta de arriba estaba vacía y la de abajo llena de gente”, cuenta.

“He hecho una cola durante una hora y media, algo normal para lanzamientos en este mundillo, sobre todo para zapatillas. En la apertura cogieron y en vez de hacer la entrada de uno en uno, permitieron la entrada a todo el mundo”, coincide Jesús, uno de los jóvenes que ya ha puesto a la venta varias camisetas.

Allí se encontraba la colección especial de 21 camisetas para adultos y niños diseñada por el artista contemporáneo Kaws —que trabajó anteriormente con Disney—, que estaba agotada en todo el mundo y que se ponía a la venta de nuevo con motivo de la apertura de la tienda de Madrid.

Cada una de ellas se vendía a 14,90 euros. “La gente cogía varias camisetas a la vez. Cuando una chica iba a reponer, se las quitaban de las manos. Era la guerra”, cuenta Adrián, que ha comprado seis unidades.

1.500 camisetas de Kaws vendidas

Apenas 20 minutos más tarde de la apertura, todos los clientes que esperaban en la calle habían entrado y ya no quedaba ningún ejemplar de las famosas camisetas en la estantería. “La gente empezó a coger baldas enteras de camisetas, muchos empujones, a punto estuvo la cosa de irse de madre”, afirma Jesús.

La cadena había puesto 1.500 unidades de esta colección a la venta en la tienda de Madrid y se han acabado todas, según han explicado fuentes de la compañía a El HuffPost Life.

La última vez que las camisetas de esta colección, llamada Kaws: Summer, se pusieron a la venta, el pasado 6 de junio, se agotaron el mismo día. Al igual que había ocurrido hace dos años con las sudaderas y las camisetas de Kaws x Peanuts, que utilizaba al popular personaje de dibujos Snoopy.

“Hemos llegado a las 7 de la mañana. Estábamos entre los 20 primeros de la cola, así que hemos podido comprar las camisetas de Kaws. Hemos sido de los últimos en lograrlo”, relata Javier a las puertas del local. El éxito de las camisetas reside en la posibilidad de revenderlas después en internet, a través de portales como Vinted, Ebay o Wallapop, a un precio mayor. “Cuestan 14,90 euros las camisetas, pero luego se pueden revender a 50 o incluso 70 euros”, cuenta Javier.

Las decenas de jóvenes que se acumulaban en la cola de la caja de la tienda llevaban varias camisetas de Kaws. “Yo he comprado para mí, pero hay mucha gente que compra para revender”, aseguraba un chico con sudadera azul, que portaba unas 10 camisetas en su cesta.

El importe gastado en la tienda también era importante: Uniqlo regalaba una bolsa de tela con una ilustración de unos chulapos del artista Gonzalo Muiño si el recibo superaba los 70 euros. “Si compras seis camisetas, ya llegas”, le decía un joven a su amiga. Además, el cliente podía conseguir un gorro si se suscribían al boletín de noticias de la cadena o una bufanda si su ticket alcanzaba los 100 euros.

Los pasillos de la tienda parecían por momentos el Rastro de Madrid, en el que los clientes intercambiaban las camisetas que habían podido coger como si se tratara de los cromos de La Liga de fútbol. ”¿Me puedes cambiar una L azul por una negra?”, le preguntaba un joven a otro. “Había muy buen rollo para cambiar los artículos”, apunta Adrián.

Muchas de las camisetas compradas esta mañana en la tienda madrileña de Uniqlo ya se encuentran a la venta en los portales especializados de internet. Julián ha colgado siete ejemplares en su perfil en Vinted. Vende cada prenda por 30 euros, el doble del precio al que las ha adquirido en la tienda.

Ese mismo precio ha elegido Fernando para sus camisetas, aunque, en su caso, ha optado por colgar su anuncio en Wallapop. “A cada camiseta, por venir de este artista y la calidad que dan por el precio que cuestan es muy buena, pues se venden por alrededor de 30-35 euros”, cuenta.

La rapidez con la que tuvieron que cogier las camisetas en la tienda se puede apreciar en que ambos anuncios contienen varias camisetas de la misma talla y el mismo color.