Me acuesto con un hombre 30 años mayor que yo. Así es el sexo geriátrico

Me acuesto con un hombre 30 años mayor que yo. Así es el sexo geriátrico

Con una población cada vez más envejecida, es hora de que afrontemos que la gente también puede disfrutar del sexo a los 70 y 80 años.

Sexo geriátricoSOLSKIN VIA GETTY IMAGES

Cuando me encontré con Patrick, llevaba años sin verlo.

Nos conocimos tras mudarse a mi pueblo con su esposa y empezamos a saludarnos por la calle cuando nos encontrábamos, pero no éramos amigos. Después de que Irene muriera de forma inesperada, se fue a vivir a otro lugar y pasé mucho tiempo sin verle.

Tres años más tarde, lo vi con buen aspecto y guapo, y así se lo hice saber. Yo estaba haciendo mis compras de Navidad y se me ocurrió enseñarle un ramo de muérdago y él, medio en broma, propuso darnos un beso para cumplir con la tradición. Lo que pensábamos que iba a ser un pico sin más acabó siendo un beso apasionado y sentimos química. Una semana más tarde, estábamos practicando sexo sobre la alfombra de su casa.

Yo sabía que él era mucho mayor que yo (yo tenía 49), pero me sorprendió cuando me dijo que él iba a cumplir 80. Yo pensaba que tenía 70 años como mucho, y debió de leerme la mente, porque me dijo: “Lo entiendo si no quieres repetir”.

Pero a mí siempre me han gustado mayores. Perdí la virginidad a los 17 con un hombre de 37, así que no era una experiencia del todo nueva. Esa primera vez con Patrick fue tórrida e intensa, y un tiempo después me confesó que le habían recetado viagra. Por entonces, yo ya tenía claro que me gustaba mucho. ¿Por qué iba a dejar que la edad fuera un obstáculo?

El sexo geriátrico, admitámoslo, es a menudo motivo de burlas. Se hacen chistes y caricaturas sobre cuerpos llenos de pellejos colgantes, falta de memoria y deseo nulo. La sola idea de que alguien de más de 75 años siga disfrutando de una vida sexual activa a menudo provoca muecas de desagrado entre la gente, y mis conocidos no son una excepción.

¿De dónde sale esa obsesión por considerar chatarra sexual a las personas de mediana edad y a los ancianos?

“Demasiados detalles, no quiero oír más”, me dijo una amiga metiéndose los dedos en los oídos. Otras personas quieren saber demasiado: ”¿Aún se le levanta?” (Sí, con un poco de ayuda farmacéutica, pero solo requiere un pelín de planficación). ”¿No te cortan el rollo todas esas arrugas?”. (No. De hecho, está en mejor forma que muchos hombres de 50 años). Y esta es mi favorita: ”¿No te da miedo que se muera mientras estáis haciéndolo?”. (¿A quién se le ocurre preguntar eso sobre el hombre del que me he enamorado?).

Parece como si la gente pudiera bromear alegremente sobre su muerte por ser anciano, cosa que no harían si fuera de mi edad. El corazón de Patrick no ha dado ningún indicio de debilidad antes, durante o después del sexo. Sabemos que lo nuestro no durará eternamente, pero no vamos a perder ni un segundo lamentándonos por no tener 53 años los dos. La vida es incierta, y si uno de los dos va a morir practicando sexo, probablemente sea yo por lo mucho que me hace disfrutar.

Pero ya vale de presumir. Es cierto que también hay aspectos negativos. Que Patrick necesite viagra descarta automáticamente el sexo espontáneo. La eyaculación es un lujo a su edad y a menudo me siento mal cuando no lo consigue (por mucho que él me asegure que disfruta). No tiene la flexibilidad ni la resistencia de un hombre joven, pero a mis 53 años, yo tampoco voy sobrada. Puede que no nos pasemos toda la noche practicando sexo, pero hay muchos preliminares, ganas de experimentar y ternura a unos niveles que rara vez he sentido por parte de hombres jóvenes.

Con una población cada vez más envejecida, es hora de que afrontemos que la gente también puede disfrutar del sexo a los 70 y 80 años, ya que ahora hay más gente sana a esa edad que nunca antes en la historia.

Según un estudio de 2015, más de la mitad de los hombres y un tercio de las mujeres de más de 70 años afirman que practican sexo al menos dos veces al mes. A esa edad, aún hay hombres y mujeres que trabajan, viajan por el mundo y corren maratones. ¿Por qué se considera desagradable que practiquen sexo? ¿De dónde sale esa obsesión por considerar chatarra sexual a las personas de mediana edad y a los ancianos?

Sé que en algún momento no muy lejano, mi vida sexual con Patrick acabará, pese a tener viagra. Sigue sano y en buena forma, pero no me hago ilusiones. Cuando llegue el momento, haremos esa transición juntos.

Mientras tanto, pretendo disfrutar a tope de mi vida sexual. Cada vez más personas vamos a superar los 80 años, así que es el momento perfecto para dejar de poner muecas cada vez que oigamos hablar del sexo entre ancianos. Os lo aseguro: el buen sexo no tiene límites de edad.

Jennifer es el pseudónimos de la autora, de 53 años.

Este post fue publicado originalmente en el ‘Huffpost’ Reino Unido y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.