La OMS desmiente a la Comunidad de Madrid: "No existe una variante colombiana"

La OMS desmiente a la Comunidad de Madrid: "No existe una variante colombiana"

El viceconsejero de Salud, Antonio Zapatero, vinculó a Colombia con la cepa del coronavirus.

Isabel Díaz Ayuso, presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, se lleva la mano al rostro.Europa Press News via Getty Images

Antonio Zapatero, viceconsejero de Salud en funciones de la Comunidad de Madrid, se refirió esta semana a la cepa B1.621 del coronavirus como la “variante colombiana”.

Según dijo Zapatero, preocupa el aumento progresivo en las últimas semanas de “la mutación 484 de la variante colombiana” en la región madrileña y su resistencia a las vacunas.

El viceconsejero reiteró entonces su petición al Gobierno de Pedro Sánchez de aumentar el control y la vigilancia en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y propuso la realización de pruebas de antígenos al 100% de la tripulación procedente de países con la incidencia “muy alta” y presencia de “cepas peligrosas”.

También el consejero de Sanidad en funciones, Enrique Ruiz Escudero, habló de “variante colombiana” cuando evitó dar una cifra exacta sobre los casos de esta cepa, asegurando entonces que eran “bastantes más” de los que le gustaría recibir a la Comunidad.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS), filial en América de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha publicado una nota titulada No existe variante colombiana de la COVID-19, en la que su equipo técnico revisó la evidencia disponible.

“Sobre la información que circula en varios medios europeos sobre la preocupación de la Comunidad de Madrid frente a una supuesta variante colombiana de COVID-19, la OPS/OMS sostuvo que no existe una variante colombiana del virus, y que esta en particular se trata de una variante más de las identificadas en el país”, asegura el texto.

La OPS precisa que, en enero de 2021, el Instituto Nacional de Salud (INS) de Colombia “pudo caracterizar gracias a su vigilancia genómica de SARS-CoV-2 un linaje de la COVID-19”, pero que también circula, al menos, en Estados Unidos, Curazao, México, Países Bajos, Dinamarca, Alemania, España y Colombia.

“Se trata de la variante B1.621, que algunos medios españoles han denominado de manera equívoca como ‘cepa colombiana’”, añade.

El virólogo Jairo Méndez, asesor regional en enfermedades virales de la OPS, explica que “esto resulta delicado, ya que además de generar información confusa sobre el origen del virus (...), propicia la discriminación y la estigmatización de países o territorios”.

De hecho, según la entidad, Colombia ha podido secuenciar 1.085 genomas completos e identificar 64 linajes del coronavirus.

La OPS recuerda que hasta el momento “la OMS no ha clasificado la B.1.621 como variante de interés o preocupación”, clasificaciones en las que se encuentran “aquellos linajes de los cuales se sospecha o se sabe que causan cambios importantes y que circulan ampliamente”.

El ministro de Salud y Protección Social de Colombia, Fernando Ruiz, criticó el viernes que el viceconsejero de Salud Pública de la Comunidad de Madrid haya vinculado la supuesta cepa con el país suramericano y aclaró que no existe tal “linaje” del virus.

“Que un país reporte una cepa, no lo define como lugar de origen”, tuiteó el titular de salud colombiano, al mencionar entonces también que la identificación de esa fue hecha por un equipo de científicos de su país.

Ruiz aseguró que “esas imprecisiones alimentan la xenofobia”, en referencia a las declaraciones de Zapatero.