Lo que no se ve de 'Pasapalabra' (y nunca se verá) en pantalla

Lo que no se ve de 'Pasapalabra' (y nunca se verá) en pantalla

El secreto mejor guardado, hasta ahora, del concurso de Antena 3.

Pablo Díaz, uno de los concursantes de 'Pasapalabra' en Antena 3.Antena 3

¿Cómo llegan los concursantes que más estudiado tienen el diccionario y la enciclopedia a participar en Pasapalabra? A la productora del programa de Antena 3 no le vale con que se presenten al casting para contar a qué se dedican y cuáles son sus aficiones. Buscan a los participantes más competitivos, los que más juego puedan dar durante un tiempo prolongado. Y para ello, en ese proceso también pasan por pruebas.

“Principalmente, lo que buscamos en un concursante son sus conocimientos”, explica una de las responsables de selección en un vídeo de Antena 3.

Las pruebas a superar

En las pruebas, los aspirantes —cuatro personas en este caso—empiezan por la parte más complicada. Lo que en el concurso es la prueba final, el rosco, pero esta vez a modo de examen escrito y por partida doble, es decir, tienen que responder a dos roscos por escrito.

Quienes lo superan con un “nivel apto” llegan a la siguiente fase, la prueba de cámara, y es ahí cuando ya deben presentarse y hablar sobre ellos. El proceso no termina ahí.

Por si no fuese suficiente con demostrar valía para superar un par de ‘roscos escritos’, el aspirante que hace la prueba de cámara tiene que superar otro más, está vez siendo grabados. En este caso se hace una simulación, es decir, imitan la prueba tal y como se desarrolla en plató: como si estuvieran en el atril, de dos en dos, contestan las preguntas simultáneamente, como el enfrentamiento final de cada entrega de Pasapalabra.

Puedes ver el vídeo aquí:

Cómo se preparan los aspirantes

La web del concurso es una buena herramienta para todos ellos, ya que ofrece la posibilidad de jugar al rosco interactivo al que ya se han enfrentado otros en el programa. Así practica el informático Adrián Vargas, que además repasa todas las emisiones, mientras que Pedro Urquijo (profesor), revela que su truco es entrenar con su hija viendo Pasapalabra.

Los otros dos participantes de este casting, en cambio, comparten por qué les motiva tanto la idea de participar en el espacio de Antena 3. Hugo Villar, estudiante, quiere “representar a los adolescentes”, para demostrar que tienen “ganas de aprender, cultura y ganas de demostrar que también están preparados”. La aspiración del funcionario Jesús Ruiz es darle una alegría a sus hijos y visitar con ella los estudios de Harry Potter en Londres.

Antena 3 ha decidido compartir este reportaje con los fans del consurso tras retomar los casting presenciales, que se hacen con grupos muy reducidos por el covid.

El método de los concursantes que hicieron historia

Juan Campoy fue el ganador del primer bote de la historia de Pasapalabra en el año 2000. En ese momento era un estudiante de 24 años. Antes de pasar por este concurso, ya lo había hecho por otros muchos, como El euromillón, Adivina, adivinanza y El precio justo. El último fue Password. Estuvo diez años participando en todos los que pudo.

Él se preparaba para Pasalapabra de otra forma: “No era para nada de diccionarios, es más, no pasaba de jugar al Trivial. Me hacía todos los roscos que podía y poco más... Antes no tenías las opciones que tienes ahora para prepararte”, explicó en El Confidencial.

Veinte años después de su logro, ve cómo todo ha cambiado radicalmente. “Me alucina la dificultad y la profesionalización de los concursantes. Nosotros éramos chicos que teníamos algo de cultura general, agilidad y estábamos acostumbrados a los juegos de mesa. Ahora, en cambio, hay verdaderos profesionales que se toman su preparación casi como una oposición”, añadió.

Además, reveló que las grabaciones —él ganó el bote de 10 millones de pesetas en solo cinco entregas— duraron dos días, tres programas por jornada con los mismos famosos.

Por su parte, Ruth de Andrés, la mítica concursante de Saber y ganar, contó en el mismo medio que ha podido ganarse la vida con los concursos. “Me gusta estudiar a diario, no es ningún sacrificio para mí”, desveló. Esperó seis años para recibir la llamada del programa de TVE tras inscribirse al casting, en el que tuvo que pasar diferentes entrevistas.

También ha participado en Pasapalabra y ahora lo hace en El cazador. Para dar el máximo nivel, utiliza diferentes recursos: “Cada día hay algo que leo, estudio, veo un documental... no hay día que no aprenda cosas. La verdad que yo hago muchas preguntas en mi casa sobre los temas que no controlo tanto, como puede ser el fútbol. Mi curiosidad es insaciable, y tengo a mi hijo frito haciéndome dosieres de muchas cosas”.

“Para concursar es muy importante que ya tengas una buena base de conocimientos, lo que no quiere decir que tengas que ser un crack en nada. Yo no soy ni experto en literatura clásica, de poesía he leído muy poca, la música clásica me cuesta mucho distinguir entre autores... Es muy importante ser curioso y leer los periódicos, que conozcas un poco de todo”, relató Miguel Ángel Caballero, un ‘Magnífico’ (es decir, acumular más de 7.000 euros) de Saber y ganar en el diario L’informatiu.

De hecho, considera que “las preguntas muchas veces no son excesivamente complicadas y cuando te dan varias respuestas a elegir, te recomiendan escoger la más sencilla porque normalmente no son respuestas rebuscadas ni con trampa”.