Sánchez logra 'in extremis' el apoyo del Congreso a la prórroga del estado de alarma

Sánchez logra 'in extremis' el apoyo del Congreso a la prórroga del estado de alarma

Se estrena una nueva geometría de apoyos; la oposición exige medidas alternativas para dentro de quince días

SánchezEFE

In extremis y después de muchos nervios. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha logrado que el Congreso avale la cuarta prórroga del estado de alarma en un duro debate en el que ha escuchado la exigencia de la oposición de que busque un plan alternativo para dentro de quince días.

Sánchez ha conseguido alargar el estado de alarma gracias a los pactos alcanzados a última hora con Ciudadanos y con el PNV después de que tambaleara esta situación por los anuncios del Partido Popular de no apoyarla y el voto en contra de Esquerra Republicana.

A favor han votado PSOE, Unidas Podemos, PNV, Cs, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Teruel Existe,PRC, Más País y Compromís, mientras que en contra se han posicionado Vox, ERC, Junts, la CUP y Foro. Las abstenciones: PP, Bildu y BNG.

De esta manera, Sánchez ha estrenado una nueva geometría parlamentaria, en la que Cs se ha movido un poco más hacia el centro aunque con un tono todavía duro con el Ejecutivo. Inés Arrimadas ha dado el ‘sí’ para “salvar vidas” y descarta que eso sea a partir de ahora la norma respecto al Gobierno.

El PP se abstiene y votará en contra si hay otra prórroga

La gran duda del debate era qué haría el Partido Popular, que finalmente se ha decantado por una abstención argumentando algunas de las medidas arrancadas por Cs al PSOE. Una abstención que ha sabido como un no, con una brusca intervención de Pablo Casado, que ha acusado al Gobierno de mentir y malversar: “Usted es el caos”, ha llegado a decirle al presidente.

Un jefe del Ejecutivo que ha solicitado a la Cámara esta prórroga como única vía para poder aplicar el confinamiento y continuar con la “victoria parcial” contra el coronavirus. A juicio de Sánchez, sería un error “absoluto e imperdonable” no alargar esta medida, que ha calificado de constitucional.

Incluso el presidente ha lanzado durante el debate la idea de que no se trata de algo “retorcido” y, por ello, ha apelado a todos a actuar en base a la moral. El comportamiento político, ha asegurado, es legítimo, pero tiene un límite: la salud. Por eso, ha explicado que se delimitan las libertades de deambular y de reunión pero con el objetivo de preservar los derechos a la vida y a la salud.

Sánchez ha defendido que es la única manera de mantener el confinamiento

Sánchez ha reconocido en la tribuna que no se entiende con Casado y le ha insistido en el apoyo. Pero Casado ya le ha avisado de que si intenta pedir otra prórroga dentro de 15 días directamente el voto será negativo. Le ha acusado de “fraude de ley”, de “cesarismo”, de comportamiento absolutista, incluso comparándolo con Hungría.

El presidente del Gobierno no ha especificado en el larguísimo debate si va a pedir otra: se ha limitado a decir que el estado de alarma debe prolongarse unas “semanas”. La Constitución no establece ningún plazo y es el Gobierno el que debe proponerlo para, luego, someterse a la votación de la Cámara Baja.

Un anuncio que sí ha hecho el presidente es que se va a decretar el luto oficial cuando la mayoría del país entre en la fase ‘uno’ y que se preparará un gran homenaje a las víctimas cuando se alcance esa nueva normalidad, que se espera que sea a finales de junio.

Otros momentos tensos se han vivido cuando ha subido a la tribuna el líder de Vox, Santiago Abascal, que ha adelantado que convocarán manifestaciones contra el Gobierno en toda España y ha sugerido la posibilidad de presentar una moción de censura si no lo hace el Partido Popular.

Sánchez sí ha contado finalmente con el apoyo del PNV, que cada día se aleja más del Gobierno. ¿La contrapartida? Desde el Gobierno se defiende una cogobernanza con las autonomías para esta desescalada, un compromiso para poder convocar las elecciones autonómicas y el condado de Treviño (Burgos) pueda encarar la nueva etapa al ritmo de las provincias vascas.

Críticas han llegado desde Esquerra Republicana, que ha votado ‘no’. Gabriel Rufián ha señalado que la desescalada debería organizarse desde los distintos territorios y ha reprochado al Gobierno que ahora dé un giro y se sustenten en la derecha de Cs.