¿Por qué algunas feministas quieren excluir a las mujeres trans?

¿Por qué algunas feministas quieren excluir a las mujeres trans?

¿Qué es una mujer para ellas?

This is a photograph of LGBTtaa22 via Getty Images

Ya llevaba un tiempo queriendo escribir un artículo sobre las autodenominadas feministas críticas de género o como las llaman despectivamente, Feministas Radicales Trans Excluyentes (del inglés TERF). Parecía un movimiento que en España no estaba muy extendido pero con la marcha de Lidia Falcón de Izquierda Unida parece que se está poniendo de moda este pensamiento en el feminismo español.

Puesto que aparecen muchas defensoras en Twitter de este movimiento, me he propuesto entender el porqué de su visión.

Por un lado, entender qué razones hay detrás de la exclusión de las mujeres trans del movimiento feminista y por qué ven una amenaza en algunas demandas del colectivo trans como el poder cambiar el género en el DNI sin necesitar un informe médico, es decir, despatologizando el cuerpo trans.

Este conjunto de feministas necesitan mantener intacto su sujeto político, la mujer. ¿Qué es una mujer para ellas? La mujer, dicen, es uno de los dos sexos binarios. Basan su sujeto de lucha en las personas que biológicamente “son” mujeres. Pongo las comillas porque en realidad la decisión de quién es mujer es de los médicos que firman la partida de nacimiento, como varón o hembra. . Los casos confusos, si son asignados a mujer, sí tienen el derecho de entrar en el grupo de las mujeres defendidas por este feminismo. Pero no pasa lo mismo con una mujer trans, pues fue asignada un sexo distinto al nacer. Aceptar a las mujeres trans desdibujaría la base sobre la que construyen su discurso.

Hay otra corriente del feminismo, más mayoritaria en España, que está repensando cuál es su sujeto político y abogan por un activismo transversal que tenga en cuenta todas las personas discriminadas por el hetero-patriarcado.

Para las feministas críticas de género, si ser mujer no es algo sólido y con unos límites claros pierden la dirección, y por eso necesitan agarrarse al sexo biológico como algo binario.

Pero negar que el sexo es un espectro es negar una realidad científica. Claro que la mayor parte de la gente se concentra alrededor de ciertas características anatómicas, pero cuando esa idea de tener características parecidas se convierte en la afirmación “biológicamente el sexo es binario” o “la naturaleza es que se es hombre o mujer”, es cuando se hacen leyes reales o sociales que discriminan al que no sigue tu teoría. Es imposible no recordar el lema de Hazte Oír: los niños tienen pene y las niñas vagina. Algunas personas son XY con vagina y sin útero, ¿qué hacemos con las que nacen así? Habiendo más personas con condiciones de intersexualidad que pelirrojos en el mundo va a ser difícil no tenerlas en cuenta.

Me da mucha pena ver cómo se enfrentan personas que quieren remar en la misma dirección.

Y aún así, consigo entender parte de las preocupaciones de las feministas como Lidia Falcón. Si desde el activismo trans y sobre todo desde el activismo intersex se consiguiera la demanda de eliminar la casilla de sexo del DNI, algo deseable desde muchos puntos de vista, esto podría ser un problema para analizar discriminaciones que sufren las mujeres. El no tener la información de quién es mujer haría que se invisibilizaran muchas discriminaciones. Pero aunque pueda entender esa preocupación, eso nunca puede ser un motivo para no ayudar y escuchar las demandas de uno de los colectivos más aplastados por esta sociedad, las personas trans, y uno de los más invisibilizados, las personas intersexuales.

Y es que realmente sería magnífico que llegara un momento en que no existieran los géneros. Que cada uno vistiese como quisiera y cada uno eligiera libremente sus gustos sin ser discriminados por ningún tipo de característica asociada al género y su expresión. Pero la realidad es que siempre habrá diferencias que hacen que ciertas personas sean más vulnerables que otras. Negar la existencia de esas diferencias no permite analizar posibles discriminaciones. Hasta ahora el género y la orientación sexual se han usado para analizarlas. En el artículo El Big Data y la discriminación de la mujer trato de comprender otras posibilidades para analizar discriminaciones, ¿sería posible encontrar las variables transversales que son características propensas a sufrir discriminación? ¿Qué características asociadas a lo femenino son vistas como algo negativo? A lo mejor haciendo esos análisis se podría eliminar el género de los documentos de identidad sin perder conocimiento, así seguir entendiendo qué personas están en riesgo y poder hacer políticas para esos colectivos.

Desde el Partido Feminista Español han englobado todas las teorías de desdibujar los límites del género y el sexo en la Teoría Queer. Es la mala de la película.

La Teoría Queer es un campo de estudios de la Teoría Crítica que, resumiendo de una manera rápida, analiza las estructuras de poder que surgen a partir del género, la sexualidad, la racialización o la clase, entre otras.

Los autores que se relacionan con la Teoría Queer son críticos con las estructuras sociales normativas y buscan desafiar y deconstruir esas ideas establecidas socialmente. Puedes encontrar diferentes autores hablando de temas muy dispares y desde puntos de vista incluso opuestos. Por eso me resulta sorprendente que esta parte del feminismo quiera silenciar todo un campo de estudios solo porque algunas de las ideas que tienen no les gustan o no encajan con la dirección en la que iban. Intentan convertir la Teoría Queer en el Comunismo para los estadounidenses, que no se pueda ni pronunciar la palabra. Sería muy triste que eso ocurriera, nos perderíamos una cantidad de filósofas y filósofos que ayudan a repensar conceptos que tenemos formados del mundo y que hacen mucho daño a tanta gente.

Me parece que sería bueno debatir todos los problemas con el mayor número de ángulos posible y así no pasar unos colectivos por encima de otros.

Me da mucha pena ver cómo se enfrentan personas que quieren remar en la misma dirección. Suficientemente difícil es el camino como para ir peleando con el que tienes al lado. Más debate, más empatía y menos odio.