Rusia acusa a Ucrania de rechazar su "misericordia cristiana" y saca pecho: "Menos problemas"

Rusia acusa a Ucrania de rechazar su "misericordia cristiana" y saca pecho: "Menos problemas"

Dimitri Medvedev, expresidente y ex primer ministro y actual alto cargo de la seguridad nacional rusa llama "cerdos ingratos" a Ucrania.

Putin saluda a Medvedev en un acto oficial en MoscúMikhail Svetlov via Getty Images

Había pocas esperanzas de una tregua total por Navidad. Ni siquiera tras el anuncio hecho por Putin, que ordenó un alto el fuego de 36 horas coincidiendo con la Navidad ortodoxa. Ucrania remarcó pronto que rechazaba esa decisión, criticando la “hipocresía” del régimen de Moscú.

La tregua comenzaba, según el mandato de Putin, al mediodía hora rusa de este viernes, pero poco después se han registrado enfrentamientos y explosiones. Un paza endeble, fallida, de la que ambas partes se culpan.

El más duro en hacerlo, como acostumbra, ha sido el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y antiguo presidente y primer ministro nacional, Dmitry Medvedev, para quien Kiev ha rechazado “la mano de la misericordia cristiana”, como recoge la agencia oficial rusa TASS.

Con todo, ha sacado pecho de la situación, porque según él, esto supondrá “menos problemas y astucia” para las fuerzas armadas rusas”.

“Creo que la mayoría de nuestros militares que participan en la la operación militar especial [eufemismo usado siempre para no decir invasión] exhaló cuando escucharon la negativa [...] al alto el fuego el día de Navidad. Menos problemas y artimañas”, escribió el político este viernes en su canal de Telegram.

Medvedev ha señalado que sentía pena por las personas que se vieron privadas de la oportunidad de ir a la iglesia. “Pero los cerdos no tienen fe ni un sentido innato de la gratitud. Solo entienden la fuerza bruta”, ha rematado.

El anuncio de Putin fue rechazado y puesto en duda por la comunidad internacional. Tras la primera negativa de Ucrania, luego ratificada por el presidente Zelenski, también mostró sus sospechas Joe Biden. El mandatario estadounidense apuntó que Putin intentaba ganar tiempo y tomar “algo de oxígeno” con ese supuesto alto el fuego de 36 horas por Navidad