Susanna Griso corta a Ayuso cuando se refería así a Iglesias: "Seguro que hay otra forma de expresarlo"

Susanna Griso corta a Ayuso cuando se refería así a Iglesias: "Seguro que hay otra forma de expresarlo"

"No siga usted".

Susanna Griso ha tenido que cortar en Espejo Público a Isabel Díaz Ayuso, candidata del PP en Madrid, después de que ésta dedicase insultos a Pablo Iglesias, líder de Podemos, durante un minuto.

“Yo creo que Pablo Iglesias es el mal y lo he dicho siempre. No me parece una buena persona, me parece alguien que ha vivido siempre de lo público pero para perpetuarse, que nació con unos discursos radicales, que bebió del chavismo, que nació de las televisiones en Venezuela, como hemos visto todos, que su partido desde lo ético, desde lo político y desde lo económico se nutrió de las peores dictaduras, de las pocas que quedan en el mundo”, ha empezado a recitar Ayuso de carrerilla.

Y no se ha quedado ahí: “Es una persona que alienta las algaradas callejeras, romper escaparates a los comerciantes, que hablaba de los escraches, de las guillotinas, que habla además siempre con esa rabia contenida, que siempre está mintiendo, que dice representar a un pueblo que cada vez es más lejano a él, que vive con una opulencia tremenda, que ha triplicado su patrimonio en muy poco tiempo. Es una persona falsa, que hablaba de su querido Vallecas que luego abandonó...”

Ha sido entonces cuando Susanna Griso ha optado por cortar a Ayuso. “No siga usted, porque en fin...”, ha dicho, pero la dirigente del PP ha conseguido añadir: “A mí me parece que eso es él”.

“Ya, pero decir que es el mal es tanto como decir que es el demonio, seguro que hay otra manera de expresarlo”, le ha intentado hacer ver la periodista, pero Ayuso ha seguido en sus trece: “A mí me parece que habla de la guillotina de esa manera, que miente de esa manera... el otro día le dieron a elegir entre libertad o comunismo y dijo comunismo. Es que cuando yo escucho el testimonio de tantas personas afectadas por su forma de gobernar en otros países, cuando escuchas a tantas personas que vienen de Europa del Este, o de Latinoamérica y te cuentan cómo entran en las instituciones de manera democrática pero sin ley... sí que pienso que es mala persona”.