Todos ganan, Cataluña y España pierden
Si en España hubiera políticos con agallas para coger el toro por los cuernos, ya se habría convocado un referéndum -sobre todo si están tan seguros de que ha ganado el NO-, aceptando que si ganara el SI a la independencia, el Estado español colaboraría en la creación de un nuevo Estado afín.
Las elecciones autonómico-plebiscitarias catalanas del domingo 27 no han servido para nada. Quizá tan solo para demostrar una vez más que, incluso en un momento tan crucial para el futuro del Estado español, todos los partidos son capaces de afirmar que han ganado en un nuevo ejercico de manipulación descarada por parte de algunos, apoyados por sus medios afines. E imagino que es por el interés de estos por lo que se incluye a CatSíqueesPot entre los del NO, cuando en su programa no optan por él, sino por un referéndum en el que los catalanes puedan expresarse mediante una persona un voto. Eso solo sirve para que los antisoberanistas se sientan falsamente vencedores y sigan sin querer ver la realidad.
Así, si entendemos que estas elecciones eran plebiscitarias, los resultados quedarían de la siguiente manera:
SI (JxSí + CUP): 47,75% (72 diputados)
NO (C's + PP + PSC): 39,15% (52 diputados)
NS/NC o pro-referéndum (CatSíqueesPot): 8,94% (11 diputados)
Lo que no sé es dónde los diferentes medios meten los 150.000 votos de los partidos que no han conseguido representación. Quizá no consideren importante su opinión.
Podríamos presentar los resultados de otra manera, según defiendan la necesidad de un verdadero referéndum:
A favor del referéndum (JxSí + CUP + CatSíqueesPot): 56,69% (83 diputados)
En contra del referéndum (C's + PP + PSC): 39,15% (52 diputados)
Y eso sin tener en cuenta que hay corrientes dentro del PSC pro-referéndum.
Si en España hubiera políticos con agallas para coger el toro por los cuernos, ya se habría convocado un referéndum -sobre todo si están tan seguros de que ha ganado el NO-, aceptando que si ganara el SI a la independencia, el Estado español colaboraría en la creación de un nuevo Estado afín; y que si ganara el NO, se conseguiría el suficiente peso moral como para rechazar cualquier nuevo intento de referéndum soberanista. Pero dudo que pase, somos más de sacar tanques cuando ya no hay soluciones factibles. El Gobierno de España seguirá mirando hacia otro lado como si no pasara nada (Rajoy es ideal para eso) y, mientras tanto, el soberanismo seguirá aumentando como lo lleva haciendo desde que se recuperó la democracia. Y una mañana nos encontraremos conque Cataluña pertenecerá a España solo en los papeles, pero no en el día a día de los catalanes.
