Las imágenes de una cámara de seguridad de un concesionario ubicado en Eastchester (Bronx, Nueva York), han dado la vuelta al mundo.
Anthony Jefferson y sus tres hijos fueron a un concesionario a comprar un coche. Mientras esperaban a ser atendidos, tres asaltantes abrieron fuego contra el local. Las cámaras de seguridad captaron el brutal ataque. Jefferson no dudó en saltar sobre sus hijos a modo de escudo para protegerles de los disparos. Dos de los asaltantes encapuchados huyeron a pie y uno en el coche de un cliente. La policía ha pedido la colaboración ciudadana para su identificación.
Jefferson recibió un balazo en el muslo derecho y fue hospitalizado en el Centro Médico Jacobi y su vida no corre peligro. Pero, a causa de sus heridas, ha perdido sus dos empleos, uno como pintor en una empresa de mantenimiento y el otro como constructor, avanzaba su esposa.
Una amiga de la familia abrió una campaña de crowdfunding para ayudar con la operación que necesita Anthony Jefferson para su operación y la terapia que puedan necesitar los tres pequeños. Necesitaban 24.000 dólares para salir adelante. Ya han recaudado más de 300.000.