Una periodista con cáncer remueve conciencias al compartir los mensajes recibidos por su físico

Una periodista con cáncer remueve conciencias al compartir los mensajes recibidos por su físico

Olatz Vázquez publicó una serie de fotografías artísticas con su cuerpo como principal protagonista.

Imagen de Olatz Vázquez compartida en su perfilTWITTER

“Si tanto os gusta opinar sobre mi cuerpo, de acuerdo, hablemos de él”. Con esta frase arranca la fotógrafa y periodista Olatz Vázquez un duro hilo para hablar de lo que está pasando desde que se enfrenta al cáncer.

Olatz publicó hace unos días una serie de fotos que compartió con el pianista James Rhodes y ahora ha querido compartir algunos de los mensajes recibidos desde entonces sobre su físico.

La periodista explica su situación: “Mido 1,66 y peso 42 kilos. En los últimos cuatro meses he perdido ocho kilos. ¿Por gusto? No. Por un cáncer gástrico y seis ciclos de quimioterapia”, antes de añadir algunas respuestas ofensivas que se encontró en su perfil. “Pues que se meta un par de platazos de potaje, que falta le hace” o ”¿eres anoréxica?” son algunos de los comentarios.

A continuación Olatz Vázquez ha escrito varios tuits donde expresa sus sentimientos y sus problemas al luchar contra el cáncer y los efectos que le ha provocado en su anatomía. Inmediatamente, la publicación se ha vuelto viral con miles de retuits, ‘me gusta’ y cantidad de comentarios animando y aplaudiendo su valentía por lo expresado:

“He tenido que comprarme ropa nueva porque la que tenía me quedaba grande. Pantalones, vestidos y camisetas que me encantaban guardadas en una caja porque mi cuerpo ya no era el mismo. 

He tenido que mirarme en el espejo y reconocerme de nuevo en sus nuevas curvas, nuevos huesos salientes, nuevas proporciones. Me he enfrentado a la báscula cada semana con miedo por ver el resultado. He llorado mirándome en el espejo.

Lo único que me reconfortaba eran las palabras de mi oncóloga tras las analíticas: “Olatz, estás perfecta”. Porque en muchas ocasiones delgadez no es sinónimo de desnutrición.

He tenido que aceptarme y quererme en un cuerpo nuevo. Y os digo una cosa: lo quiero. Lo quiero con toda mi alma porque está luchando contra un gigante.

Y lo expongo, sí, porque estoy orgullosa de él; de lo que ha pasado estos últimos meses, de cómo ha afrontado un tratamiento muy agresivo y de cómo, a pesar de todo, me sigue pidiendo correr, saltar, bailar y disfrutar”.

Estas son algunas de las respuestas:

La viralidad de su hilo ha llevado a la inesperada protagonista a plantearse otro debate. “El hecho de exponer mi enfermedad en redes sociales y mi cuerpo en mis fotografías, ¿da derecho a la gente a opinar sobre él?”, se pregunta. Inmediatamente han llegado nuevas réplicas, aunque las opiniones son diversas sobre ese supuesto derecho.