La historia de la nadadora olímpica que salvó a 18 personas de morir ahogadas

La historia de la nadadora olímpica que salvó a 18 personas de morir ahogadas

La abanderada de la Delegación de Refugiados Yusra Mardini tuvo que huir de Siria en 2015.

Yusra Mardini, durante un preolímpico de natación disputado en BerlínSoeren Stache / DPA / Picture Alliance via Getty Images

Detrás de las medallas y grandes triunfos que se logran en una olimpiadas se esconden otras que se consiguen mucho antes de llegar hasta la competición. Una de ellas es la historia que acompaña a la abanderada de la Delegación de Refugiados en Tokio 2020. Yusra Mardini se vio forzada a abandonar su hogar, dejando en 2015 una Siria asolada por la guerra.

La joven compite en los 100 metros mariposa, pero ya ha probado su valía en las aguas del mar Egeo. Ese fue el escenario en el que salvó a 18 personas de morir ahogadas, tras remolcar la embarcación en la que navegaba junto a ellos con la ayuda de su hermana. Lo hicieron remando con una sola mano durante tres horas, tirando de una lancha destina a seis ocupantes, pero cargada con una veintena de personas.

“Si me iba a ahogar, al menos lo haría habiéndome sentido orgullosa de mí y de mi hermana”, explica Mardini en un documental publicado por la organización de los Juegos Olímpicos. Con esa fortaleza fue como las hermanas Mardini lograron evitar una tragedia que se mascaba desde el momento en que el motor de la embarcación se detuvo.

Una trayectoria deportiva que ni las bombas frenaron

Hija de un entrenador de natación, Mardini siempre fue una joven promesa que logró el pase al Campeonato del Mundo de Piscina Corta para representar a Siria en 2012, a pesar de que el país ya sufría los constantes bombardeos del conflicto bélico. Sus entrenamientos acabaron teniendo que ser postergados, puesto que las explosiones destruyeron las instalaciones en las que se preparaba, al igual que su casa.

En 2015, la joven siria huyó de la guerra rumbo a Grecia. A su llegada al territorio heleno, pudo viajar a Alemania donde acabó pasando las pruebas para ingresar en un club de natación. En 2016 era elegida para representar a la Delegación de Refugiados en la cita olímpica de Río de Janeiro. Esta vez tratará de morder el metal en Tokio.