Zaragoza y Huesca vuelven a la fase 2 de confinamiento

Zaragoza y Huesca vuelven a la fase 2 de confinamiento

En el caso de la capital aragonesa, como medida preventiva ante el Pilar y en el de Huesca, por alcanzar la tasa de 700 casos por 100.000 habitantes.

Una joven pasea por las solitarias calles de El Tubo, en Zaragoza, el pasado abril.Alvaro Calvo via Getty Images

La Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Aragón va a emitir una orden para incorporar durante una semana a Zaragoza a la fase 2 desde el próximo jueves, 8 de octubre, como medida preventiva ante la posible celebración de reuniones sociales en los días festivos que rodean al 12 de octubre, Día del Pilar. Huesca pasará también a fase 2, sin confinamiento perimetral, durante una semana.

Según ha avanzado el Gobierno de Aragón, esta decisión se enmarca en el principio de prudencia, dado que los datos epidemiológicos de la capital aragonesa reflejan una incidencia de entre 200 y 300 casos por 100.000 habitantes estable en las últimas semanas.

Con esta orden, que se publicará los próximos días en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), se pretende tanto preservar el sistema sanitario como prevenir un futuro confinamiento de la ciudad en semanas posteriores.

De este modo, Zaragoza pasará a fase 2, con la salvedad de que se permitirá mantener el 75 % en los espectáculos y actividades culturales que cuenten con butacas preasignadas.

Asimismo, y ante el descenso de los casos, mañana se emitirá una orden para retirar el confinamiento perimetral de Ejea de los Caballeros (Zaragoza), que se mantendrá en fase 2.

Por su parte, y ante el incremento de los positivos notificados en las últimas semanas, la ciudad de Huesca pasará también a fase 2, sin confinamiento perimetral, durante una semana, al alcanzar una tasa de 700 casos por 100.000 habitantes.

Se decretará también, mediante una orden que se publicará mañana en el BOA, el confinamiento perimetral de la localidad zaragozana de La Almunia de Doña Godina y su paso a fase 2, dado que el municipio ha alcanzado tasas de 1.000 casos por 100.000 habitantes y el propósito es frenar su tendencia ascendente al ser polo de atracción de su entorno.