Las claves de la semana: Salvemos al PSOE

Las claves de la semana: Salvemos al PSOE

Apenas queda mes para las elecciones y Pedro Sánchez lo tiene francamente difícil. Y como tanto el PP como Podemos intentarán polarizar al máximo la campaña para achicarle el el espacio al secretario general socialista, ha decidido hacer lo que no ha hecho en dos años, lanzar un SOS a todo el PSOE, incluidos sus mayores críticos.

EFE

Si no lo han hecho aún, están a tiempo. Nadie como el gran Dani de La Fuente, en el Hoy por Hoy de la Cadena Ser, para ponerle música a la política cada mañana. Este periodista melómano escucha 80 canciones nuevas cada semana. Y en esta que acaba entre coaliciones, pulsos, vídeos y desacuerdos eligió Baloncesto, de La Prohibida.

No porque el secretario general del PSOE hiciera una exhibición de su deporte favorito, sino para traducir las voces que desde Podemos pidieron al PSOE que reconsiderara su amor por ellos y el "no, gracias" con el que Pedro Sánchez despachó la oferta para compartir candidatura al Senado con los morados. Así sonaba:

"Quererme y quererte a la vez

es un riesgo que no puedo correr"

"Si te quiero, me muero"

Que viene a ser, como dice De la Fuente, un "si te quiero, me muero". En medio del lamento, se oye otra estrofa que recuerda la irrupción en el debate de Susana Díaz, tan reticente como Sánchez al acuerdo con Iglesias:

"La reina del invierno

reflejada en los espejos del infierno

volando sola sobre el viento"

Pues eso, que no había terminado Iglesias de cerrar los detalles de la coalición por absorción de IU, cuando ponía en marcha la operación "desgastemos al PSOE", como si los socialistas no supieran ajarse por ellos mismos. "A veces somos nuestros peores enemigos", Patxi López, dixit. ¿Sólo a veces? "Dan tanta pena que dan ganas de adoptarlos", decía estos días un dirigente de Podemos.

Más que adopción es erosión lo que busca Iglesias al tratar de instalar en el electorado que fue el PSOE, tras su abrazo con Ciudadanos, el responsable de que no haya en España un gobierno de cambio y que será también él quien cargue con la culpa de que el PP mantenga la mayoría absoluta en la Cámara Alta. De paso va y azuza el jolgorio orgánico y las contradicciones de los socialistas.

Porque cuando Sánchez dijo "no, gracias" dejaba en evidencia las negociaciones que los presidentes de Valencia, Aragón y Baleares mantenían con otras fuerzas de izquierda en sus Comunidades para concurrir juntos en las candidaturas del Senado. Y, sí, Tximo Puig, Javier Lambán y Francina Armengol habían puesto a Ferraz al tanto de sus conversaciones. Nadie les dijo no, nadie les frenó y nadie les puso objeción.

La zapatiesta no la montó Puig

La zapatiesta no la montó Puig, a quien Sánchez desautorizó con el argumento de que no podía ir en la misma plancha que un partido que defiende el derecho de autodeterminación. Se lo dijo, casualmente, el mismo día que bendijo la entrada del PSC en el gobierno de Ada Coalu en Barcelona.

El presidente valenciano invocó la tan cacareada declaración de Granada, el texto que glosa la reforma federal en la que los socialistas defienden precisamente que el Senado sea una verdadera Cámara territorial y que los gobiernos regionales designen a sus senadores. Esto por no mencionar que ya en 2000 fueron junto a IU en las listas del Senado, el ejemplo de la Entesa catalana o el acuerdo por el que los del PSOE de baleares concurrieron con otras fuerzas de izquierda en 2011 a la Cámara Alta.

Sin senadores del PSPV

Como en la letra de La Prohibida, Puig se reivindicó esta semana como "un balón de baloncesto botando dentro del pecho" del propio PSOE, pero la polémica no llegó viva al viernes ya que para entonces el presidente de la Generalitat valenciana tenía claro que no contaba con el apoyo del resto de barones, en especial el de Susana Díaz. Lo que no asumirá en su haber Puig y así lo avisa es la ausencia de senadores del PSPV cuando el 26-J se escruten las papeletas y no obtengan representación en la Cámara Alta.

Así andaban los socialistas, de nuevo a la gresca, cuando Pedro Sánchez anunciaba, en un vídeo casero sólo para sus seguidores de Facebook, su nuevo fichaje estrella, la magistrada Margarita Robles. Abandona el Supremo para ser la número dos de la lista por Madrid y regresar así a la política, dos décadas después de haber formado parte del Gobierno de Felipe González, como secretaria de Estado de Interior en la etapa de Belloch como ministro de Justicia.

No es la única ex que ha decidido arrimar el hombro. A La operación "salvemos al PSOE" se suma también el ex ministro Josep Borrell, pero él para formar parte de un comité asesor, idéntico papel al que desempeñarán también Ángel Gabilondo y Jordi Sevilla de un total de 18 nombres que formarán lo que Sánchez ha venido a llamar "gobierno en la sombra". Sin comentarios.

Sánchez lanza un SOS

Porque queda mes para las elecciones y Sánchez lo tiene francamente difícil. Y como tanto el PP como Podemos intentarán polarizar al máximo la campaña para achicarle el espacio, ha decidido hacer lo que no ha hecho en dos años, lanzar un SOS a todo el PSOE, incluidos sus mayores críticos. A Zapatero, la mano que ha mecido todo este tiempo la cuna de Susana Díaz, le ha pedido que se implique en la campaña; a la presidenta de Andalucía, que le haga de telonera hoy en su proclamación como candidato y a Rubalcaba, que participe en algunas reuniones de estrategia. Con mayor o menor gana, todos se han puesto en primer tiempo de saludo porque lo que está en juego no es ya el liderazgo de Sánchez, sino la supervivencia de las siglas.

Así que disfruten lo que puedan de la unidad interna, dure lo que dure y escuchen lo que escuchen fuera de los focos.