'Muerte en el Burj Khalifa'

'Muerte en el Burj Khalifa'

Una de las grandes protagonistas de esta novela es la ciudad de Dubai. Poderosa, resplandeciente, orgullosa de su pasado y sus tradiciones y presuntuosa con sus avances y desarrollo, no dejará indiferente al lector. Una ciudad donde los camellos se mezclan con los coches más potentes y lujosos del mercado; donde los centros comerciales más grandes del mundo conviven con los tradicionales zocos.

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Hessa Al Falasi, la investigadora de la abaya, es la joven emiratí protagonista de mi primera novela, Muerte en el Burj Khalifa, y está a punto de despertar de su letargo. En pocos días, el libro estará ya disponible en las librerías. Ya no hay marcha atrás, no más correcciones, no más dudas. De la misma manera, voy a tener también que salir de mi cómodo anonimato, y de la reclusión de la etapa de su escritura, participando en todo aquello que haya planificado la editorial para su lanzamiento: mesa redonda en la BCNegra, presentaciones en diferentes ciudades, entrevistas... Teniendo en cuenta la magnífica gestión de las profesionales encargadas de este tema, creo que no será poco.

¿Estamos preparadas Hessa y yo para este momento? Habrá que verlo. Hessa nació para ser recreada por sus lectores, aunque ella, al igual que todos los demás personajes literarios no tuvo opción ni fue preguntada si quería exponerse al juicio de los demás y, más aún, si estaba de acuerdo con que en la imaginación de otros ella pudiera ser diferente a la que realmente es: una bella mujer árabe con carácter; una joven abogada viuda que, vestida con su abaya, la túnica negra típica de Emiratos Árabes, en su versión más estilosa, se meterá en más de un lío para intentar esclarecer las circunstancias que llevaron a la muerte a su primera Ameera en el interior del ascensor del Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo; una mujer que no soporta que la enjuicien; contradictoria a veces, pero generosa, emotiva y sensible; una persona controladora, aunque en muchas ocasiones las situaciones se le irán de las manos. ¿Le gustará que sus pensamientos y sentimientos más íntimos, como la atracción que siente por Ahmed, sean de dominio público? No estoy segura... No obstante, lo peor que le podría pasar es quedarse atrapada en las páginas del libro, muerta en vida, sin futuro. Por lo tanto, le deseo muchos lectores.

La otra protagonista de la novela, la exótica y sorprendente ciudad de Dubái, en cambio, está deseosa de exhibirse. Poderosa, resplandeciente, orgullosa de su pasado y sus tradiciones y presuntuosa con sus avances y desarrollo, no dejará indiferente al lector. Una ciudad donde los camellos se mezclan con los coches más potentes y lujosos del mercado; donde los centros comerciales más grandes del mundo conviven con los tradicionales zocos; una ciudad que una Nochevieja gana el récord Guiness con sus fuegos artificiales lanzados desde el Burj Khalifa y cuyas noches se llenan de bullicio meses después para celebrar el fin del ayuno diario del Ramadán.

¿Y dónde quedo yo con unos protagonistas tan fuertes? Son momentos de incertidumbre, de exposición pública... Un libro, y más una novela, es un proceso muy íntimo, muy personal y, aun cuando narre una historia aparentemente lejana al autor, siempre tiene algo de él. Sin ir más lejos, confieso que siento aversión por los ascensores desde que de niña tuve una mala experiencia, y mi libro empieza con una muerte en un ascensor, y no en un ascensor cualquiera, sino en el del edificio más alto del mundo, no puede ser pura casualidad.

Espero que los lectores disfruten con su lectura tanto como yo me divertí y sigo disfrutando cuando escribo sobre Hessa y sus investigaciones. Inshallah.

¿Y por qué escribí una novela situada en el mundo árabe? Simplemente porque me fascinan su cultura y sus tradiciones, aunque en algunas ocasiones se alejen de aquellas con las que me crié. O quizá, por eso mismo, porque en un mundo de globalización, el que haya aun elementos que nos diferencien debería ir más allá de la tolerancia y ser un motivo de celebración. La escritura de Muerte en el Burj Khalifa me ha permitido compartir durante un tiempo la vida cotidiana de una familia emiratí de clase media, sus comidas, celebraciones, desencuentros generacionales y sus anhelos y preocupaciones, que no son más que el deseo de un buen futuro para sus hijos, la salud y la búsqueda de la felicidad. ¿No es ese el deseo de todas las familias sea cual sea su país de nacimiento?

El dos de febrero me estreno en la BCNegra, en una mesa de autores noveles (no nobeles, no se confundan), y asistiré humilde pero feliz con mi libro bajo el brazo. Una novela de trama negra en su idea original, aunque con trazos de otros colores por exigencia de los propios personajes a lo largo de la narración: romanticismo, exotismo, humor..., porque así es la vida, llena de matices.

Pero ahora les dejo. Antes de meterme en la vorágine del lanzamiento, voy a seguir disfrutando de un ratito de soledad y tiempo para seguir escribiendo. La investigadora de la abaya, que no quiere vivir el día de la marmota, me reclama para que continúe con sus conflictos familiares y otros misterios que resolver, y yo, responsable de su creación, muy gustosamente transcribiré lo que ella me dicte.

Espero que los lectores disfruten con su lectura tanto como yo me divertí y sigo disfrutando cuando escribo sobre Hessa y sus investigaciones. Inshallah.

Puedes leer aquí los primeros capítulos de la novela

Gema García presentará hoy martes a las 19:30 su novela Muerte en el Burj Khalifa en la Casa del Llibre de Barcelona (passeig de Gràcia 62), acampañada del escritor y periodista Enric Calpena y de la directora de Roca Editorial Carol París.