El socio de Putin se planta con su programa nuclear y manda un claro mensaje

Corea del Norte ha reiterado que no tiene intención de renunciar a su programa nuclear y ha culpado a Estados Unidos de "crear tensión" en la península de Corea, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, describiera al país como una "potencia nuclear", según informa Radio Free Asia. 

El país liderado por Kim Jong-un ha realizado seis pruebas nucleares desde 2006 y ha declarado constantemente que nunca renunciará a sus armas nucleares. También exige que se le reconozca como potencia nuclear, algo que tanto Estados Unidos como su aliado, Corea del Sur, han rechazado firmemente y piden en cambio la "desnuclearización" de Corea del Norte.

Tras su investidura el lunes, sin embargo, Trump mencionó a Corea del Norte en un breve intercambio con los medios en los que se refirió al país como una "potencia nuclear". "Nos llevamos bien. Creo que estará contento con mi regreso al poder", dijo el presidente estadounidense a los periodistas en referencia al líder norcoreano. 

La referencia de Trump, según el mismo medio, planteó la posibilidad de un cambio en la política estadounidense hacia el reconocimiento del estatus nuclear del país. "Como Estado poseedor de armas nucleares responsable, seguiremos esforzándonos para prevenir todas las formas de guerra y proteger la paz y la estabilidad", dijo el martes Jo Chol Su, representante permanente de Corea del Norte ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra, durante una conferencia de la ONU sobre desarme.

"Estados Unidos ha estado realizando espionaje aéreo contra Corea del Norte desde principios de año… Las provocaciones políticas y militares estadounidenses son la causa principal del desencadenamiento de conflictos armados y del debilitamiento de la estabilidad regional", agregó. 

Además, señaló que "la única manera de proteger la paz es mediante la defensa más fuerte. Impediremos firmemente cualquier intento de las fuerzas hostiles de provocarnos militarmente".