Putin preocupa cada vez más a Occidente con el último lazo atado en sus estrategias con países hostiles
El nuevo tratado firmado entre Irán y Moscú asegura una mayor cooperación en defensa entre ambos países, algo que ha hecho saltar las alarmas en la comunidad internacional.

Moscú continúa acercando posturas con sus diferentes aliados. Primero fue con Corea del Norte, con el que firmó el Tratado de Asociación Estratégica el pasado 18 de junio de 2024. Ahora, el turno es de Irán, con el cual ha firmado un Tratado de Asociación Estratégica Integral con el objetivo de reforzar sus relaciones en todas las materias, en especial en la militar.
El tratado fue firmado el pasado viernes en Moscú durante la visita del presidente iraní, Masoud Pezeshkian, que realizaba su primera visita al Kremlin desde que obtuvo la victoria en las elecciones del pasado julio. "Irán es un socio importante para nosotros con el que estamos desarrollando una cooperación polifacética", afirmó ante la presidenta el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Durante la visita, el presidente de Irán viajó acompañado de su ministro de Petróleo, por lo que cabe la posibilidad de que hablasen sobre como eludir las sanciones internacionales en este sector. Respecto a las ofensivas en Gaza y Líbano, el presidente iraní coincidió con Putin en que este tipo de agresiones deberían llegar a su final.
Este acuerdo durará 20 años y algunos de los objetivos que se han fijado son el respeto de la integridad territorial y la soberanía de ambos países o no dejar sus territorios para realizar actividades hostiles contra el otro. "Esto crea mejores condiciones para la cooperación bilateral en todas las áreas", defendió Putin tras firmar el acuerdo. "Necesitamos menos burocracia y más acciones concretas. Cualquier dificultad creada por otros podremos superarla y avanzar", añadió el mandatario ruso.
Cabe destacar que el país de Putin ha empleado durante la guerra con Ucrania en varias ocasiones drones iraníes, mientras que Estados Unidos afirmó en septiembre que Teherán suministraba misiles balísticos de corto alcance a Rusia para realizar ofensivas contra Ucrania. Sin embargo, Teherán negó dichas acusaciones.
Desde que Rusia invadió Ucrania, Moscú ha ido estrechando lazos con países hostiles a Estados Unidos, como es el caso de Corea del Norte o China, con quien también firmó un acuerdo de asociación estratégica.