Reino Unido se topa con un "monumental" problema: "España está obsesionada con el aeropuerto de Gibraltar"
"Una de las partes está dando un paso atrás".

Continúan los problemas y los atascos en las negociaciones postbrexit entre España y Reino Unido por el futuro de la relación de la colonia británica del Peñón de Gibraltar con nuestro país. Sobre la mesa se habría detectado un problema nuevo y monumental que estaría detrás de las causas del retraso del progreso en las negociaciones para acordar un tratado.
Según recoge The Olive Press, mientras que tanto desde el propio ministro principal gibraltareño, Fabián Picardo, como por parte del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, lo que se ha venido advirtiendo para no haber llegado al desenlace de estas negociaciones son "complicaciones técnicas". Sin embargo, el viceministro principal de Gibraltar, Joseph García, ha dado más pistas.
"Es perfectamente comprensible que, ante incursiones, vetos y comportamientos inconsistentes en la frontera, muchas personas tengan preocupaciones genuinas sobre lo que pueda traer el futuro", señaló García en un mensaje de año nuevo, dejando la pista clave: "A menudo, para bloquear el progreso basta con algo tan simple como que una de las partes dé marcha atrás en algo que había acordado previamente". ¿A qué se refería?
"[España] aislaría efectivamente a Gibraltar"
En este punto, en la citada información se alude a otra noticia del medio británico The Independent, recogiendo declaraciones de la periodista Sarah Sands sobre la materia. "Una fuente de la UE me dice que España está obsesionada con el aeropuerto, que según afirma no está en territorio gibraltareño según el Tratado de Utrech", cita a la profesional, que también valora que "si España reclama el aeropuerto, aislaría efectivamente a Gibraltar".
La clave es que dicho tratado que data de 1713 no recoge como cesión a Reino Unido ese itsmo de tierra sobre el que se edificaron las instalaciones aeroportuarias y que Londres ha venido controlado en la práctica desde el siglo XIX.