Una serie de muertes misteriosas sacude al aceite de girasol ruso
El poder de los servicios de seguridad de Moscú se ha extendido más allá de la contrainteligencia y ha llegado a confiscar empresas bajo presión.

Varias personas relacionadas con una de las mayores empresas productoras de aceite de girasol de Rusia han muerto misteriosamente, según informa el medio Newsweek. Este apunta que el año pasado fallecieron el director comercial de Blago, Alexander Khaidin, y el fundador, Arkady Fosman.
En 2009, además, falleció el abogado y auditor Sergei Magnitsky. Tras estas tres muertes, la empresa pasó a manos de Viktor Voronin, ex director del Departamento "K" del Servicio de Seguridad Económica del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB).
"La muerte de estos tres individuos prominentes y, posteriormente, el creciente poder de Voronin en Blago son significativos porque resaltan la creciente fuerza de los servicios de seguridad de Rusia y cómo cada vez es más difícil desafiarlos sin arriesgarse a morir", resalta el medio estadounidense.
Además, destaca que el poder de los servicios de seguridad de Moscú se ha extendido más allá de la contrainteligencia y ha llegado a confiscar empresas bajo presión debido a las sanciones occidentales.
El último miembro de la compañía encontrado muerto fue Khaidin, quien murió el 15 de enero, aparentemente por suicidio. Poco antes de su muerte, sin embargo, fue citado por la policía económica por un caso de soborno en China, según el medio ruso Fontanka. Fosman, por su parte, habría muerto de un edema cerebral y pulmonar en un hospital de Alemania en octubre de 2024.
Magnitsky murió en 2009 después de ser golpeado hasta la muerte mientras estaba en prisión tras su arresto relacionado con su investigación sobre fraude fiscal que involucraba a 23 empresas, por un total de 230 millones de dólares vinculados al Kremlin, según informó The Washington Post.
El abogado partició en el caso Hermitage Capital, en el que trabajó con el gestor de fondos de cobertura nacido en Estados Unidos Bill Browder para descubrir un fraude fiscal generalizado y una corrupción vinculada al Kremlin a principios de la década de 2000. Pero ante los resultados de sus hallazgos Browder fue deportado de Rusia y Magnitsky enviado a prisión. Su arresto y procesamiento fue iniciado por el propio Voronin, según la revista New Times Russia.